Félix Población
Habrá quienes lo recuerden porque causó la expectación popular que se advierte en la fotografía, en una ciudad que por entonces estaba aún lejos de ser la que es y se parecía mucho más a la que había sido y recordamos los de mayor edad y memoria. Corresponde al momento en el que una vieja motonave, de nombre Ciudad de Algeciras, acaba de atracar en el puerto interior de Gijón, medio siglo después de que fuera botada en tiempos de la dictadura del general Primo de Rivera, nombre que llevó originalmente el barco, que a saber si contó con la presencia del dictador en el momento de tocar la mar. Con la instauración de la segunda República, pasó a denominarse tal como conocieron la motonave los gijoneses en su penúltimo destino, antes de ser desguazada en la localidad asturiana de San Esteban de Pravia. Estuvo atracada por lo tanto en El Muelle de Gijón algo más de ocho años, después de haber sido cafetería y hasta pub-discoteca un tiempo. Adquirida en una subasta por la Asociación Asturiana de Capitales de la Marina Mercante, podría haber tenido, en una ciudad todavía marinera como la villa asturiana, un destino más acorde vinculado con el mundo del mar, por respeto al menos a su dilatada trayectoria. Pero no parece que en aquel Gijón de la post-dictadura hubiera mentes capaces de proponer tal iniciativa y a la motonave se la fue dejando morir de una manera negligente y lamentable a la vista de cuantos paseantes frecuentaban uno de los lugares más habituales de esparcimiento de la ciudad. Me falta por confirmar lo que un gijonés ha aportado como comentario a la instantánea que ha colgado Avelino Castro Meana (cuyos datos agradezco) y para lo cual le he pedido al comentarista algún detalle más al respecto: que la Ciudad de Algeciras fue la primera embarcación en transportar tropas sublevadas desde África en 1936. Si fuera así, que haya muerto coincidiendo casi con la muerte de quien se hizo como caudillo de aquella sublevación, no deja de ser una curiosa casualidad, que quizá desconocía el último gobierno municipal de la dictadura.
DdA, XX/5.863
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