Lazarillo
Siempre que nos sintamos inclinados a decir, ante políticos corruptos como los que negocian con el material sanitario para lucrarse a bote pronto, que la política es una mierda o aquí lo que hace falta es mano dura (en alusión a nuestro más ominoso pasado), debemos tener en cuenta que en este país, en medio de situaciones como las que nos dan a conocer los medios de comunicación estos días y se refieren a uno de los periodos más luctuosos vividos en España desde la guerra, hay más gente de la que se piensa capaz de gestos como el que cuenta esta médica logroñesa. La política debería perseguir que más personas como ese paciente de María José Palomo tuvieran voz en el Parlamento y contar para ello con políticos cuya trayectoria fuera tan limpia como quienes actúan así en un tiempo de pandemia en el que, mientras había quien se forraba vendiendo mascarillas defectuosas, se dejó morir a miles de ancianos sin asistencia hospitalaria.
DdA, XX/5587
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