martes, 2 de enero de 2024

ACNUR Y SU CAMPAÑA DE AYUDA A UCRANIA, ¿Y POR QUÉ NO A GAZA?

 

Publicado en Facebook

Lazarillo

Lo de ACNUR le toca especialmente a este Lazarillo por razones que no son del caso. Por eso me llama la atención que esta organización de la ONU, en plenas fiestas navideñas y a fin de conmover al respetable, mantenga en Facebook una propaganda de ayuda a la población civil ucraniana. No porque esa población no merezca esa ayuda solidaria, como cualquier otro país invadido y en guerra, sino porque esa publicidad no se comparta, al menos, con la que merecería la población palestina en Gaza, donde desde casi tres meses el Estado de Israel está devastando sus ciudades y asesinando hasta la fecha a más de 10.000 menores, con una balance global de víctimas mortales que supera las 22.000 personas. No hay pueblo en el mundo que soporte un número de refugiados tan alto como el pueblo palestino, casi seis millones, y sin embargo, la Agencia de la ONU para Ayuda a los Refugiados llama a la solidaridad en Facebook -ahora que se perpetra un genocidio en Gaza- con el pueblo ucraniano, con la imagen de una madre y un niño cuyo aspecto es ostensible mejor que el que se ofrece por los medios cuando nos llegan noticias de la masacre israelí en Gaza, cuyos hospitales, escuelas y albergues han sido bombardeados por los invasores israelíes. Desconozco si ACNUR no está haciendo una campaña de solidaridad con la población gazatí porque se lo impide Facebook, pero lo cierto es que acordarse de las madres y los niños ucranianos ahora y no hacerlo con las madres y niños palestinos, a quienes se les ha privado de todo, es como para hacérselo notar a esa organización, que debería dar al menos una nota explicativa. 

*La nota de que da ACNUR en su promoción de ayuda a Ucrania dice:  "¡Miles de familias perdieron sus hogares en Ucrania! La guerra ha dejado casas destruidas y familias sin refugio. Con tu apoyo, proporcionamos mantas, refugio y ropa de abrigo para enfrentar el invierno".


Posiblemente no sólo hayan arrojado bombas y misiles sobre los hermanos de los niños y niñas asesinados en Gaza, sino la semilla más perturbadora para su memoria: se llama odio y suele no conocer, por su renovada siembra en aquella tierra que llaman "santa", el bálsamo del olvido. F.P.

DdA, XX/5.530

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