Félix Población
Con ocasión de los habituales sorteos extraordinarios de Lotería de Navidad que se acaban de celebrar, me parece oportuno recordar el que se celebró una vez terminada la Guerra de España, el 22 de diciembre de 1939. Hacerlo, además, con la documentación gráfica propia de la época, tal como fue transmitida la salida del premio Gordo, nos permite apreciar en los rostros de los afortunados que hasta costaba reírse pasados ocho meses del término de aquella infausta tragedia. Tenidas en cuenta esas circunstancias, lo que más me ha llamado la atención no ha sido que los Niños del Colegio de San Ildefonso saluden brazo en alto, como corresponde al tiempo de gratitud y apoyo que la España franquista le debe entonces a la Alemania de Hitler y a la Italia de Mussolini por su decisiva ayuda para que los militares sublevados impusieran su dictadura. Lo que más abochorna del reportaje, en la narración engolada y fatua de su cronista, es que en un determinado momento, al referirse a las bolitas de la Lotería, nos dice que tienen nombre de mujer y se dejan apalear. El detalle no le pasó inadvertido a uno de los protagonistas de aquel sorteo, Manuel Viñuales Fernández, que casi nonagenario y hace tan solo seis años, dejó escrito al pie del vídeo el siguiente comentario: "Yo, Manuel Viñuales Fernández, a mis 13 añitos canté el premio de 15.000.000 de pesetas y a mis 89 años sigo avergonzándome de la frase que el narrador del acontecimiento pronunció con respecto al apaleo de las bolitas: " Se dejan apalear. Tienen nombre de mujer". A las nuevas generaciones y a las que crecimos en parte durante la dictadura, nos conviene recordar que venimos de aquella España y que frasecitas como la apuntada siguen teniendo sus efectos en nuestros días, donde hay voces en el Parlamento que se niegan a reconocer la violencia machista que permanece activa en nuestra sociedad. El balance de víctimas mortales desde 2003 se cifra en 1.182. Ocho mujeres fueron asesinadas el pasado mes de diciembre en España, dando lugar a que fuera el mes con más feminicidios de 2022 y el tercero de la serie histórica junto al del año pasado. Me gustaría pensar que este año, con su triple cita electoral, puede ser una ocasión importante para que hagamos del voto una herramienta valiosa contra esa lacra. Sobre todo, las mujeres.
DdA, XIX/5.345
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