domingo, 28 de agosto de 2022

LAS MUJERES NUNCA DEBEN GANAR PESO EN LA IGLESIA, SEGÚN EL OBISPO AUXILIAR DE MADRID


Lazarillo

Estas son las declaraciones, publicadas en el diario La Voz de Asturias hace unas fechas, de quien fuera portavoz de la Conferencia Episcopal Española y sigue siendo obispo auxiliar de Madrid, uno de esos monseñores carcas con los que cuenta la obispalía en activo de este país, que por ser prelado y asturiano de nacencia es uno de los directores de los cursos de verano de La Granda, a cuyo sostenimiento contribuyen, entre otras entidades públicas, la Universidad de Oviedo. Estos cursos se desarrollan en Asturias cada mes de agosto y este año se está celebrando la cuadragésimo cuarta edición. Este Lazarillo ignora la materia sobre la que se requiere la presencia directiva del obispo Martínez, pero podría ser cualquiera de las que se impartían durante el nacional-catolicismo, pues a esa etapa histórica corresponden manifestaciones como las que ilustran este comentario. Pareciera, además, que el redactor del titular hubiese buscado con este una lectura con segundas de esas palabras del prelado, más parecidas a las que recomendaría una firma de dietética que a la consideración que merecen la mujeres en los tiempos que corren y que la institución eclesial a la que pertenece el obispo Martínez no alcanza a comprender ni admitir. Solo falta que al papa Francisco lo retiren y su sustituto vaya en la línea de los precedentes. Es lo que la mayoría de los monseñores españoles posiblemente desea.

   DdA, XVIII/5.251   

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