EL "MODERADO" FEIJÓO SE ESTRENA CON VOX

Félix Población

Después de que el fracasado y traicionado líder del Partido Popular, Pablo Casado,  instara a Fernández Mañueco a forzar unas elecciones autonómicas en Castilla y León, traicionando a su socio de gobierno al estilo Ayuso, ya tenemos en aquel ejecutivo a la extrema derecha, según era de prever. 

Así se inaugura el periodo del nuevo y único líder del PP, Núñez Feijóo, al que llaman moderado, a quien corresponde en realidad la decisión tomada por Mañueco, aunque todavía no esté don Alberto de facto al frente del partido. En verdad sí lo está in pectore desde el 23-F en que traicionó a Pablo Casado. Fue entonces cuando el barón galaico dijo aquello de creer en la honorabilidad de Ayuso en lo de las comisiones cobradas por su hermano. 

Feijóo, que mintió al afirmar que la entrada de Vox en el gobierno autonómico de Castilla y León fue culpa del PSOE -fue Mañueco quien se levantó de la mesa de negociación con Tudanca al cuarto de hora-, no va a ser en ningún caso el líder moderado que aconseja la derecha europea, ayer escandalizada con el gobierno de coalición acordado por el Partido Popular con la extrema derecha. 

El paso dado por Mañueco cuenta con el aval de su nuevo jefe, plegándose en el acuerdo de legislatura suscrito a muchas de las exigencias planteadas por Vox. Tenemos, por lo tanto, a un nuevo líder de la derecha estrenándose con un gobierno autonómico que  pacta con la extrema derecha. Ocurre en el país donde la extrema derecha forjó un golpe de estado militar que dio origen al episodio más trágico de nuestra historia y a la más larga dictadura de extrema derecha en suelo europeo. 

Podrá Feijóo contarnos lo que guste, pero es así como principia su carrera política a la cabeza del principal partido de la oposición, y esto es una muy mala noticia para la democracia española, cuya memoria democrática volverá a ser silenciada en Castilla y León, según ocurrió durante la dictadura y buena parte de las últimas cuatro décadas. Silenciar o enterrar esa historia da pie a que renazcan gobiernos como el que ahora tenemos en esa comunidad.

Asalto a la democracia

Félix Maraña

Piensa que Alberto Feijóo,

como Fernández Mañueco,

son tan sólo ese muñeco

que dice sí como no.

Igual da arre que so,

pues lo suyo es arrear

y puestos a gobernar

prefieren la coalición,

unidos de extrema unción

con los fachas del lugar.

Porque a Fernández Mañueco,

hijo de alcalde franquista,

no se le nubla la vista,

decidido, presto y clueco,

cuando recibe aquel eco

de su facha educación.

Hoy son Castilla y León

pero el resto viene luego;

están preparando el fuego

los leones y el ratón.

Asaltan la democracia,

para minar su estructura

y montar la voladura

por dentro con eficacia.

Es una suerte de acracia

que devendrá en dictadura

si no se le aplica cura

al monstruo liquidador.

Negro, muy negro el color

de negra legislatura.

DdA, XVIII/5106