David Acera*
Las bibliotecas son a nuestra cultura lo que los centros de atención primaria son a nuestro sistema sanitario: espacios de proximidad desde los que poder adentrarse en el estudio de la salud de la población o de las distintas expresiones artísticas y culturales sin salir de tu propio barrio.
Actualmente estoy de gira por América Latina y recibo con mucha preocupación las noticias sobre los recortes continuos en la Red Municipal de Bibliotecas de Oviedo, así como la cancelación de los cuentacuentos municipales, ÚNICO programa cultural que desde hace más de 15 años lleva algún tipo de arte profesional de manera continuada a todos los barrios de la capital de Asturias.
Sigo con interés y atención la programación cultural de Asturias y, he de decir, que hasta el momento, el actual concejal responsable ha llevado una línea bastante continuista con la apertura cultural llevada a cabo durante el gobierno de Agustín Iglesias Caunedo y continuada por el gobierno tripartito posterior, tras la presión del movimiento ciudadano Oviedo SOS Cultura, en el que tuve el orgullo de participar. Este movimiento consiguió la aparición de numerosos programas que aún hoy perduran: desde apuestas cinematográficas a festivales musicales que trascienden, la ópera, la zarzuela y la música sinfónica que habían constituido durante los años precedentes una suerte de monocultivo cultural en la capital asturiana. Está bien que existan consensos sociales en aspectos como los que relato, por eso no puedo por menos que quedar perplejo con la situación que vivimos con nuestras bibliotecas.
A lo largo de los años, como autor, narrador y hombre preocupado por la cultura de mi ciudad, no es la primera vez que me toca salir a defender a nuestras bibliotecas y a sus trabajadoras y trabajadores. Hoy lo volveré a hacer: por favor rectifiquen. Abran de manera inmediata todas las bibliotecas, devuelvan el control comunicativo de las actividades a los profesionales de las mismas y reinicien el programa municipal de cuentacuentos. Respecto a este último punto es importante recordar que la Narración Oral, los cuentacuentos, son un Arte Escénica como el teatro o la danza y la desarrollan artistas. Es por ello que se hace imprescindible recurrir de una vez en el ayuntamiento de Oviedo al contrato artístico porque es lo que la institución está contratando: artistas. Espero que esta actividad no sólo se reinicie sino que la sigan desarrollando profesionales de la narración con un currículum contrastado y un proceso riguroso de selección.
Mañana cojo un avión y vuelvo a casa con muchas ganas de defender la cultura de todos, la cultura de Oviedo. Les espero este sábado a las 12 de la mañana en una especial y reivindicativa sesión de cuentos en Trubia.
¡Viva la cultura!¡Vivan las Biblios!¡Vivan los cuentos!
*David Acera es Narrador Oral, autor, director y actor ovetense.
DdA, XVIII/5077
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