Al cine se va a reír o llorar. Cualquier otra tarea, que se puede hacer en otro lugar, es perder el tiempo. Con la película "Maixabel", de Itziar Bollain, inauguramos nuestro Festival Internacional de Cine de San Sebastián. Este Festival nació en 1953, pero tiene 69 años. Uno nació en el mismo año, pero el festival me gana por uno, aunque ayer fui al cine a llorar. Bollain ha hecho un film para el encuentro. Maixabel, viuda de Juan Mari Jauregi, representa todo el dolor acumulado en este nuestro País Vasco, pero también toda esperanza. Creo que de quien hay que hacer ahora una película es de Jauregi. Etarra, miembro del PCE, miembro de Euskadiko Ezkerra, miembro del PSOE, Gobernador civil de Gipuzkoa, asesinado por ETA en Tolosa. He llorado en esta película, pero también lloré en la de Mikel Zabaltza, víctima del terror de Intxaurrondo. Jauregi estaba convencido que lo iban a matar, ETA o Galindo, el general laureado y amnistiado por el Estado. Se adelantaron los otros, pero a Jauregi no se le perdonaría que descubriera algunos delitos del terrorismo de Estado. Lo que no vería él siendo gobernador. Hubo gente del PSOE que le retiró el saludo. Por eso entiendo que Maixabel representa el encuentro. Dar la mano al asesino de tu marido sólo lo hace una persona de corazón desbordante y mirada amplia. A Maixabel tampoco le perdonan algunos su generosidad. Yo la aplaudo y abrazo. Terminó la proyección y me dijo Koro: "No sé cómo no has aplaudido". Me conoce. Cinco veces cinco junté las manos para comenzar el aplauso, pero el silencio era aún más emocionante. Una película donde el amor al mundo reduce el dolor a experiencia y lo trasciende. El canto final de la canción más íntima de Xabier Lete, conmueve y refuerza todos los sentimientos. Al cine se va a reír, llorar, aplaudir o sentir. Zorionak, Itziar, Maixabel, Maria Jauregi Lasa . Besarkada bero ta handi bat.11 veces compartida.
DdA, XVII/4954
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