LOS MALOS NOS VAN A PILLAR DISTRAÍDOS, YA VERÉIS

Paco Faraldo

Hablan los escolásticos de la diferencia entre el saber vulga , del cual el cuñadismo sería un subgénero, y el saber científico o por causas, que es, por ejemplo, el que nos distribuye generosamente y a todas horas la caterva de epidemiólogos que nos agobian con sus disquisiciones sobre la pandemia desde hace más de dos años. Estos días se produce el desembarco de los expertos en geología, sección vulcanólogos, que nos explican en detalle lo que es un piroplasto y nos descubren que una colada no tiene que ver necesariamente con el lavado de las sábanas. Ahora que nos íbamos olvidando del pangolín y de los huracanes del verano la naturaleza sigue inventando maneras de mantenernos entretenidos con sus fechorìas y entre los volcanes que actúan en sintonía, los ataques de los osos a las señoras que vienen de comprar el pan y los jabalíes que circulan por el carril ciclista sin respetar los semáforos, ya apenas queda tiempo para concentrarnos en las miserias más acuciantes y remediables, cuyos culpables están a la vista y siguen preparando nuevos desafueros. Los malos nos van a pillar distraídos, ya veréis.

DdA, XVII/4957