El espectáculo que Estados Unidos está ofreciendo al mundo en la persona de su presidente viene siendo desde que fue elegido penoso. Aun así, la victoria de Biden, de producirse -como parece- va a ser muy ajustada, lo que da idea del pensamiento de casi la mitad de los electores, muy posiblemente inclinados a creer -en su mayor parte- las falacias y pataletas de Trump respecto al resultado electoral. Mientras eso ocurre en USA y se nos informa hasta la saciedad de ello, nuestros medios de comunicación apenas prestan atención a lo que ocurre en China, ese gran país que acabó con el virus que asola el mundo occidental y que, sin embargo, sí ha merecido la atención de varios medios de comunicación polacos de carácter liberal. El éxito sanitario se debió a las medidas científicas adoptadas, los test masivos y la diligentes cuarentenas, leemos en esos periódicos. Gazeta Wyborcza, señala que la tasa de mortalidad de China se mantiene en un nivel bajo entre los países que tienen estadísticas relativas al virus. "No hay duda de que la epidemia en China se ha controlado", indica el diario, y anota que actualmente hay una docena de nuevas infecciones al día, principalmente "importadas". El periódico liberal y la publicación de centro derecha Rzeczpospolita coincidieron en que China, en comparación con Estados Unidos o Europa, tiene un control casi completo de la situación. Estos artículos de opinión en dos de los principales medios de comunicación polacos se han publicado al tiempo que se extiende sobre Europa una segunda ola de la pandemia, obligando a muchos países europeos a iniciar cierres o toques de queda. Al analizar la batalla antipandémica de China, Rzeczpospolita atribuyó el éxito del país asiático a cuarentenas estrictas y bien planificadas de ciudades donde habitan millones de personas, que se fueron levantando gradualmente con el tiempo, así como a esquemas de prueba extremadamente extensos. Los científicos, señala Gazeta Wyborcza, son muy respetados por el liderazgo político del país. "El partido chino vive en simbiosis con la ciencia y está orgulloso de ella", leemos en el diario, y enfatizó que es "inconcebible" que los líderes chinos cuestionen públicamente la opinión de los científicos o aconsejen algunos tratamientos cuestionables como hacen algunos líderes occidentales. La vida en China ha recuperado en general su normalidad, se afirma en Rzeczpospolita, y la de sus habitantes ya no "gira en torno al coronavirus", sino que "viajan y van a comer a restaurantes".
DdA, XVI/4660
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