Félix Población
En los inicios del anómalo verano
ya en declive, días antes de la onomástica del rey emérito, quien fuera
director del diario ABC y fundara el diario La Razón a imagen y semejanza del primero,
Luis María Anson, firmaba en su quizá último periódico El Imparcial un artículo que, a la vista de la ominosa huida de la
justicia de Juan Carlos de Borbón, cobra una versión insospechada que quizá no
imaginaba el autor cuando lo firmó.
Muy avezado por su dilatada experiencia
y grado profesional en el análisis político, quien posiblemente sea el decano
de los periodistas españoles en activo preveía en ese breve texto de su sección
diaria el planteamiento, por parte de Pedro Sánchez a lo largo de la actual
legislatura, de una crisis constituyente, cuyo desenlace final sería su
autoproclamación o así como presidente de la tercera República Española.
La estrategia del entorno del
presidente del Gobierno, según apuntaba Anson en clave tan de su gusto
conspiranoico, sería fragilizar entre otras instituciones a su bien amada
monarquía, sin contar para ello con la colaboración estelar que a ese fin protagonizó
hace un mes su admirado rey emérito, huyendo de España como su abuelo hace casi
noventa años, con presuntos delitos de cohecho, fraude fiscal y blanqueo de
capitales en el pasaje saudí. El mutismo al respecto del Jefe del Estado en
ejercicio filial contribuye a ensombrecer aún más la integridad de la corona.
A don Luis María, aun pintando
bastos para el rey padre desde que la justicia suiza intervino en sus cuentas,
ni se le pasó entonces por la tecla que serían esas cuentas las que podrían
favorecer su diagnóstico, sin que el contubernio social-comunista del Frente
Popular -como denomina Anson al actual Gobierno de coalición- interviniera para
nada en ese supuesto y afanoso celo por fragilizar la corona borbónica de sus
fervores.
Antes bien, y muy en contra de
lo aventurado por el presidente del diario El
Imparcial, el valedor más importante de la corona de España en sus coetáneas
y muy graves adversidades está siendo precisamente el Presidente del Gobierno
(“la Constitución no se trocea”, afirmó), el mismo que con cainita sesgo guerracivilista estima don
Luis María que ocupa la jefatura del Frente Popular redivivo.
*Artículo publicado en La última hora
*Artículo publicado en La última hora
DdA, XVI/4602
No hay comentarios:
Publicar un comentario