"Isaac Pérez Cabo, sindicalista, huyó a un monte próximo llamado Pajariel, desde donde algunas noches, ocultándose, bajaba a ver a su mujer, Jerónima Blanco Oviedo, de 22 años, embarazada de seis meses, dedicada a sus labores, sin filiación política ni sindical, y a su único hijo, Fernando, de 3 años, hasta que en una de aquellas visitas vio, horrorizado, a la puerta de la casa los cadáveres de su esposa y de su hijo asesinados. Aquel 23 de agosto de 1936 a las tres de la madrugada, los falangistas habían ido a casa de Isaac Cabo, al que buscaban, rompieron la puerta con las culatas del fusil, sacaron a Jerónima a la calle y la mataron a tiros. La vecina de enfrente lo vio todo escondida desde su ventana y contó a Abel, al sobrino nieto de Jerónima que al niño, a Fernando que tenía tres años, lo tiraban al aire y disputaban a ver quien hacía diana a disparos como si estuvieran jugando al tiro al plato".
Santiago Macías
Autor de El monte o la muerte
La comisión de Cultura que se celebrará mañana en el Ayuntamiento de Ponferrada aprobará la propuesta de dedicar un espacio público a la memoria de Jerónima Blanco Oviedo y su hijo de cuatro años, Fernando Cabo Blanco, dos víctimas del franquismo a los que pude poner nombre y rostro hace unos años, tras el descubrimiento de una carta manuscrita del marido y padre de ambos, Isaac Cabo, que figuraba en el procedimiento sumarísimo que le condenó a prisión en Santander, tras la caída del frente republicano en aquella provincia.
Jerónima y Fernando fueron asesinados el 23 de agosto de 1936 a las afueras de Ponferrada por un grupo de pistoleros falangistas, siendo enterrados más tarde junto a la casa en la que vivían, después de estar durante días expuestos delante de la misma.
En la carta, Isaac también lamentaba el asesinato de sus padres, Demetrio y Visitación, de dos de sus hermanos y de un cuñado. Hoy, mi recuerdo va dedicado también a sus descendientes, algunos de los cuales pude conocer y trasladar el hallazgo de aquel expediente y hacerles entrega del mismo, junto a la fotografía de aquella madre y su pequeño que encabeza esta publicación.
Gracias a esta propuesta, Jerónima y Fernando pasarán a formar parte de los espacios dedicados en el municipio a las víctimas de la dictadura, una iniciativa que comenzó a partir de 2013, tras la llegada al gobierno municipal de Samuel Folgueral Arias, que hoy tiene continuidad con el nuevo gobierno de Ponferrada, presidido por Olegario Ramón.
Estos lugares son:
-Calle Alcalde García Arias, último regidor republicano, fusilado en julio de 1936.
-Calle José Merayo "Morete", asesinado y desaparecido en octubre de 1936. Está situada en Flores del Sil, el barrio al que Morete dio nombre.
-Calle Memoria Histórica, en homenaje al movimiento que nació en El Bierzo en 2000.
-Calle Cinco de Junio, situada en la pedanía de Columbrianos, junto al lugar donde fueron asesinados ese día de 1945 tres guerrilleros antifranquistas y dos enlaces de la localidad.
-Eliminación del único escudo franquista de propiedad municipal que permanecía en Ponferrada, situado a la puerta del colegio Campo de la Cruz.
-Retirada de la referencia al "Generalísimo" en la calle principal de Bárcena del Bierzo.
-Declaración institucional en el ayuntamiento de Ponferrada de condena al golpe militar del 18 de julio de 1936.
-Calle Alcalde Puente Falagán, primer regidor republicano.
DdA, XVI/4411
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