sábado, 30 de noviembre de 2019

LAS TRES MIL CHARLAS DE TAIBO


Félix Población

Una vez, hace ya algunos años, me cité con el profesor Carlos Taibo en el café Comercial de Madrid. No nos conocíamos, pero tuve esa vez el convencimiento de que Carlos es uno de esos profesionales de la Universidad que han hecho del saber un permanente incentivo para participar lo sabido a quienes le escuchan. Por eso posiblemente, además de su ejercicio didáctico en la Autónoma de Madrid como profesor de Ciencia Política, Taibo necesita dar charlas aquí y allá, generalmente en lugares afines con su filosfía libertaria. Discurren por lo tanto esas comunicaciones por los márgenes del sistema y es de esperar que algún día Carlos seleccione las que considere más oportunas para compartirlas con los lectores de sus libros. De momento, mi estimado profesor ha hecho balance y suma ya nada menos que tres mil charlas desde que las inició hace veinte años:

"Llevo desde entonces un cuaderno -dice- en el que anoto el lugar en el que se han desarrollado, la fecha, la materia y el organizador. Sabía yo desde hace meses que se aproximaba la charla número tres mil. Un par de semanas atrás comprobé que coincidía llamativamente con mi intervención en Teruel del pasado jueves. Me alegro de que se haya perfilado en Teruel, un lugar que para mí existe, y con fuerza, desde mucho tiempo atrás. No creo que haya acudido a la ciudad aragonesa menos de una veintena de veces.
Ya sé que las gentes del 'star system' disfrutan de muchas más invitaciones a hablar en público de las que me benefician a mí. Pero creo, aun así, que si entre nosotras hubiera un ranking de charlistas, estaría en uno de los lugares de arriba. Con el agregado importantísimo de que en mi caso, lejos del 'star system' mencionado, me beneficio del cariño, de la sabiduría y del coraje de muchas gentes interesantes y luchadoras.
En las dos últimas semanas, sin ir más lejos, he disfrutado de un salón de actos lleno en una facultad universitaria en Valladolid, me han acogido dos ateneos libertarios en pequeñas localidades como Hervás y La Iglesuela, otro tanto han hecho las amigas de un centro social recién creado en Madrid y he podido comprobar la hospitalidad del mundo libertario en Teruel. Lo repito una vez más: soy un genuino privilegiado. Que vengan otras tres mil".

A por ellas, Carlos, y muy agradecidos por la amenidad de lo que cuentas y razonas, por tu personalísimo y documentado punto de vista y por la satisfacción y contento que te anima al participarnos tu comentario. También los que te escuchan e intervienen  en coloquios y demás merecerían figurar en ese compendio de charlas al que te animo.

               DdA, XV/4352                

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