miércoles, 27 de noviembre de 2019

ADA COLAU Y LOS VÍDEOS DEL "MACHISMO EN CASTELLANO"


Félix Población

Creo que no fue nada convincente la alcaldesa de Barcelona, Ana Coalu, cuando ayer una periodista de un programa de sobremenesa de un canal privado -me parece que Cuatro- le preguntó sobre lo que hoy en el diario La Vanguardia se califica como "polémicos vídeos" del Ayuntamiento de Barcelona. 

Me estoy refiriendo al uso del castellano y el catalán en una campaña de comunicación audiovisual, coincidente en su inicio con el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. Concejales de varios partidos como Ciudadanos, Partido Popular y BCN pel Canvi han criticado que en uno de esos anuncios, en el que dos jóvenes hacen comentarios machistas en castellano, el tercer joven que les reprocha esa actitud lo haga en catalán. 

La señora Colau no ha sabido o no ha podido responder al claramente dispar empleo discursivo de uno u otro idioma, con manifiesto agravio al castellano, identificativo en ese caso de quienes mantienen comportamientos machistas. Se trata del único anuncio, de los tres que se han elaborado (los otros dos utilizan únicamente la lengua catalana con subtítulos en castellano), en el que se hace uso del bilingüismo como herramienta de comunicación que debería ser o es habitual en libertad y convivencia en la sociedad catalana. 

Si algo que debería ser ejemplo de esa realidad se manipula de tal modo y tan manifiestamente, en detrimento y desdoro la población castellano-hablante o de aquella que utiliza indistintamente ambas lenguas, la señora Colau debería haber reconocido que no basta con echar balones fuera, recurriendo a la repulsiva actitud de Ortega Smith negando la violencia machista, tal como hizo.

Ayer, la señora alcaldesa de Barcelona tuvo una gran oportunidad de reconocer que en ocasiones se mete la pata -si es que ha sido así-, y la mejor  forma de admitirlo es pedir excusas. Me niego, en principio, a creer que esa necesaria y muy sensible campaña feminista se hizo con tan dañosa como inadmisible intencionalidad discriminatoria, porque daría pie a consideraciones de muy grave tenor.  Máxime cuando un gobierno de coalición progresista, como el que está pendiente en España, tiene en un partido independentista catalán la última palabra. 

A doña Ana le hubiera bastado imaginar la que se hubiera armado si los machistas de un anuncio similar se hubieran expresado  en catalán.

                      DdA, XV/4349               

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