Félix Población
En pleno ocio estival agosteño, y después de que asistiéramos en Madrid a la doble investidura de la derecha radical en la figura del nuevo alcalde y la nueva presidente de la Comunidad de Madrid, la ultraderecha franquista se ha sentido capaz de reunir a treinta de los suyos, o así, y presentarse en la sede del Partido Socialista en la calle Ferraz.
Allí, donde la militancia socialista le gritó al presidente del gobierno que "Con Rivera no", una vez accedió a La Moncloa mediante la moción de censura contra Mariano Rajoy que salió adelante gracias a Unidos Podemos, los neofranquistas le exigieron a Sánchez que no pacte con los "comunistas" de Manuela Carmena, aunque a los que de verdad se referían era a Podemos y Ahora Madrid, o al menos eso se leía en alguna de las contadas pancartas exhibidas, que hubiera suscrito el mismo Alfonso Guerra.
La precaria concurrencia había sido convocada por una autodenominada Plataforma Por un Madrid de Centro, según cuenta Antonio Maestre en La Marea, sin que para tal iniciativa contase con la autorización pertinente de la Delegación del Gobierno. Sabido es que no la necesita la derecha incivil y retrógrada cuando se arropa, como es el caso, en gritos de exaltación al dictador, enseñas preconstitucionales y otras loas al viejo régimen. No pudo faltar entre estas el canto del Cara al sol y el himno nacional según letra del poeta gaditano José María Pemán, entonada brazo en alto por algunos de los presentes.
En ningún caso -como hubiera ocurrido en una manifestación no autorizada de distinto signo- las unidades antidisturbios que controlaron a los concurrantes solicitaron a estos documentación alguna, a pesar de que hubo conatos de incidentes con los periodistas que cubrieron la información.
Es posible que la noticia haya llegado hasta Doñana, sin que tenga muchas esperanzas de que el presidente del gobierno en funciones repare en su solaz en las razones por las cuales la ultraderecha se ha presentado ante la sede de su partido: la preferencia de Sánchez de gobernar con la abstención de la derecha que pacta con la ultraderecha, antes que con quienes le han permitido llegar a la presidencia del gobierno.
DdA, XV/4251
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