Lazarillo
Quiero añadir a la oportuna reflexión final del no menos
certero artículo de mi estimado amigo Alejandro Álvarez, que se publica en este mismo número de DdA, que me parece de una
extrema gravedad, en un país de Europa que sufrió hasta cuatro guerras civiles
en un siglo, que el lider de Vox haya propuesto en una entrevista
publicada recientemente en un medio de comunicación la idea de que los ciudadanos españoles puedan
disponer de armas de fuego para su defensa personal. Semejante propuesta, suscrita por un político adscrito a un ideario de extrema derecha en una nación que soportó una crudelísma guerra promovida por la extrema derecha y a la que siguió una dictadura de extrema derecha, debería alarmarnos una vez más ante las circunstancias políticas que atraviesa España, circunstancias que se ha enconado de manera notable desde el llamado procés y el episodio esperpéntico de la autoproclamación por el Parlament de Cataluña de "la república catalana como Estado independiente y soberano". Por si no valiera como mejor ilustración las barbaridades que se cometen con las armas de defensa personal en Estados Unidos, donde sólo sufrieron una guerra civil, el líder caballista de Vox pretende equipararnos a aquella nación con un pasado como el nuestro y unos precedentes no muy lejanos como los del terrorismo de ETA y los atentados de extrema derecha durante la Transición (entre 500 y 600 muertos).
DdA, XV/4117
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