Del reciente enfrentamiento entre dirigentes “oficialistas” y “críticos” del Partido Socialista Obrero Español -PSOE-, en el que acaeció la dimisión de su Secretario General, debe saberse qué ha pretendido el poder verdadero, es decir, don Dinero (1), al permitir que sus medios de comunicación de masas no solo lo retransmitieran, sino que también criticaran a quienes lo protagonizaron.
Es incuestionable que después de las elecciones
generales del 26 de junio pasado, don
Dinero pretendía que tras las próximas, las terceras consecutivas, su bipartito
siguiera al frente tanto del gobierno como de la oposición, es decir, el Partido Popular -PP- y el PSOE, respectivamente. Y la efectividad de tal pretensión
tendría que reflejarse en encuestas rigurosas, esas que don Dinero maneja, de
tal modo que previeran no solo una mayoría absoluta del PP, solo o junto al
partido Ciudadanos -C’s-, sino también que el PSOE lograra más diputados que PODEMOS.
Así, el PSOE lideraría la oposición al previsible
empobrecimiento que el gobierno del PP seguirá infringiendo a la mayoría social
para enriquecer, aún más si cabe, a la minoría que ostenta el poder que don
Dinero da; y sus medios de comunicación de masas promocionarían así al PSOE para
que eventualmente sustituya al PP al frente del gobierno.
Pero tal pretensión no casa con que cuando los entonces
dirigentes del PSOE se afanaban en cumplirla, don Dinero permitiera que sus
medios revelaran y criticaran el enfrentamiento de aquellos con los dirigentes “críticos”
del mismo partido. Porque la única consecuencia posible de tal enfrentamiento era
sumir en la estupefacción a la casta electoral de dicho partido y así sus
integrantes opten por votar al PP o por abstenerse. Y la consiguiente merma
electoral del PSOE facilitaría que se cumpliera la parte principal de aquella
pretensión, es decir, que el PP alcance la mayoría absoluta, pero conllevaría la
posibilidad de que dicha merma llegara a ser tan grande que el PSOE no supere
en número de diputados a PODEMOS, por lo que la pretensión de don Dinero se
cumpliría sólo en parte. Hay que indagar,
pues, en la razón por la que éste ha permitido que sus medios divulgaran y
criticaran el susodicho enfrentamiento entre los dirigentes del PSOE, suscitando
así la posibilidad de que su pretensión no se cumpla íntegramente.
Una posible razón sería que las encuestas que don Dinero
maneja no prevean la efectividad de lo principal de su pretensión, es decir, la
mayoría absoluta del PP, solo o junto C’s, lo que no debería resultar extraño
dado que la corrupción del primero de estos partidos ha sido divulgada. En
efecto, los medios de comunicación de masas airearon profusamente la corrupción
del PP para que cualquiera la conociera y forzar así su sustitución por C’s. Y,
aunque el PP ha sorteado electoralmente su sustitución y sigue siendo el
partido nuclear para servir a los intereses de don Dinero, cabe la posibilidad
de que el número de personas tan inmorales como para votarlo sea insuficiente
para alcanzar dicha mayoría.
Don Dinero pretendería, si las encuestas que maneja sustentaran
tal posibilidad, ahora trasvasar el voto de su otra casta electoral, la del
PSOE, al PP. Y para conseguir tal pretensión, habría asegurado a los dirigentes
“críticos” del PSOE que sus medios de comunicación iban a justificar que lo
controlaran de cualquier modo, mientras que los dirigentes “oficialistas” del
mismo se afanaban en que su pretensión inicial se llevara a cabo. Así, don
Dinero habría instigado el enfrentamiento
entre los dirigentes críticos y
oficialistas del PSOE, siendo la acritud y bajeza de este enfrentamiento previsibles
porque las ambiciones personales y la mediocridad de quienes lo iban a
protagonizar eran de sobra conocidas; y sus medios de comunicación de masas no
solo lo retransmitieron en vivo y en
directo, sino que también lo jalearon con el fin de que la casta electoral
del PSOE, estupefacta por el patético enfrentamiento de sus dirigentes, opte en
unas eventuales terceras elecciones por votar al PP o por abstenerse.
Al término del planteamiento de esta hipótesis, los
medios de comunicación de masas siguen aireando aquel enfrentamiento entre los dirigentes
del PSOE, pero no achacan al mismo su descalabro en unas eventuales terceras
elecciones, sino sólo la gran magnitud de éste. En cualquier caso, hay que
esperar a que don Dinero maneje las encuestas que reflejen la repercusión en
las eventuales elecciones del enfrentamiento que ha instigado entre los
dirigentes del PSOE. Entonces, si aquellas encuestas previeran la efectividad
de su pretensión, es decir, que el PP, solo o junto a C’s, alcance la mayoría
absoluta, aunque sea a expensas del descalabro electoral del PSOE, aquellas
elecciones se celebrarán. Pero si las mismas encuestas descartaran la
efectividad de tal pretensión, no habría terceras elecciones, sino que el PP presentaría
a su candidato para la investidura de presidente del gobierno y al menos una
parte significativa parte de los actuales diputados del PSOE se abstendrían
para posibilitarla.
La concatenación de
las siguientes certezas y suposiciones resume la hipótesis recién expuesta: Don
Dinero, es decir, el poder verdadero:
I.
Maneja las encuestas rigurosas sobre unas
eventuales terceras elecciones y éstas no prevendrían que el PP obtuviera, solo
o junto a C’s, mayoría absoluta en el Congreso para que su candidato pueda ser
investido presidente del gobierno.
II.
Pretende, pues, trasvasar el voto de su
otra casta electoral, la del PSOE, hacia el PP.
III. Con tal fin, habría instigado un
enfrentamiento entre los dirigentes oficialistas y críticos del PSOE,cuya
acritud y bajeza eran previsibles por las conocidas ambiciones personales y la
mediocridad de quienes lo iban a protagonizar.
IV.
Sus medios de comunicación de masas lo
retransmitieron “en vivo y en directo” y lo criticaron con inusitada virulencia
para aturdir a la casta electoral del PSOE, pretendiendo así que una parte de
quienes la conforman opten por abstenerse o votar directamente al PP, cuya
mayoría absoluta aseguran.
V.
Pero no manejaría aún las encuestas que
reflejen la efectividad de su pretensión al incitar aquel enfrentamiento en el seno
del PSOE: Si la previeran, las terceras elecciones se celebrarán y si la
descartaran, no se celebrarán y entonces una parte de los actuales diputados
del PSOE se abstendrá para que el PP pueda formar gobierno.
*El autor, Julián Aceitero Gómez, es doctor en Medicina y autor de varios artículos, publicados en piensaChile, basados en el estudio del sumario de la muerte del presidente Salvador Allende Gossens.
DdA, XIII/3356
1 comentario:
En las segundas elecciones el PSOE mejoró el porcentaje...
Según la Junta Electoral de Sevilla, Andaluzas 15, desde el 2000 no hacen el recuento definitivo y dan el provisional por bueno (Dejaron de abrir de forma generalizada el "sobre 1" de las mesas y sumar los votos para dar por bueno lo que diga la empresa electoral)
Así que a saber lo que dice la empresa, parece que nadie más hace el recuento
Publicar un comentario