Lazarillo
Tengo entendido que don Mariano va a ser entrevistado en Tele5 al tiempo que
en El País se celebrará el debate audiovisual al que no ha querido
acudir y en el que le sustituye la vicepresidenta doña Soraya. Sáenz de Santamaría
se las verá con Sánchez, Rivera e Iglesias y El País hace gala de la lección
de democracia y pluralismo que eso comporta, aunque queden al margen dos
formaciones políticas con representación parlamentaria, Izquieda Unida y Unión,
Progreso y de Democracia. Dice el presidente del Gobierno, para excusarse de su
ausencia, que él tiene que seguir trabajando de presidente del Gobierno y otros
no tienen ese problema. Eso no obsta, sin embargo, para que se pase varias
horas como comentarista de la COPE en el programa Tiempo de juego, con su hijo incluido, al que dio un par de collejas por criticar la labor profesional de uno de los radiofonistas deportivos. Con su
decisión de acudir al telediario de Pedro Piqueras el lunes, a la misma hora en
que tendrá lugar el debate en El País, don Mariano actúa no sólo
como un contraprogramador sino como un iluso, pues sus nocivos asesores se van
a enfrentar al día siguiente con la decepcionante realidad de las audiencias. El varapalo va a ser de órdago en contra del presidente plasmado. Y se lo merecerá por fatuo y por cobarde.
DdA, XII/3140
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