La arenga despachada por la exlideresa
Aguirre con su pregón en la Feria de Sevilla en pro de la españolía,
representada según doña Esperanza en los festejos taurinos, está surtiendo sus
efectos entre un sector de la población que se considera llamado a promocionar a
toda costa el toreo en las ciudades y pueblos de España, que diría un cronista
patrio de añeja memoria.
Llevando quizá esos carpetovetónicos afanes hasta las mismísimas esencias de
las coplas de Manolo Escobar (“no quiero que a los toros te lleves la minifalda”),
dos peñas taurinas de la localidad castellonense de la Vall d’Uixó decidieron promocionar
el cartel informador de la ganadería correspondiente a las corridas de este año por medio de una joven en toples, que desfiló de esa guisa por las calles de aquel municipio.
Aunque la comisión de las fiestas patronales
de Sant Vicente Ferrer ha calificado de indecente el hecho, asegurando que
desconocía semejante iniciativa por parte de esas dos peñas, llama la atención que el
Ayuntamiento, presidido por Óscar Clavell López (Partido
Popular), haya eludido hasta ahora cualquier tipo de manifestación al respecto, a pesar de la polémica generada entre los ciudadanos. Habrá quien piense que con su silencio apoya tal promoción, por burdo y machista que sea su trapío.
En todo caso, lo deseable sería que tanto los ciudadanos como el alcalde reprobasen esa imagen que se da de la mujer en un lugar de España para promover, precisamente, lo que la señora Aguirre considera ejemplo cabal de españolía.
Puntos de Página
DdA, X/2.693
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