Lazarillo
Este Lazarillo, siempre que asoma algún nuevo testimonio de aquel periodo de esperanza que supuso el gobierno socialista de la Unidad Popular en Chile, presidido por Salvador Allende, no pierde la oportunidad de analizarlo. Máxime si quien lo da estuvo muy cerca de quien lideró aquel proyecto. Así hará con el libro que se acaba de presentar en Madrid (Centro de Diversidad Cultural de Venezuela en España), del que es autor Joan Garcés, asesor en su día del presidente chileno. El libro tiene un título que ya de por sí mueve al interés: “Allende y la experiencia
chilena. Las armas de la política”. Fue presentado por el profesor Marcos Roitman, que calificó la obra como texto clásico en tanto ofrece lecciones
de la historia que trascienden lo meramente coyuntural y plantea
problemas de vital importancia que aun hoy mantienen su vigencia: las
contradicciones entre reforma e insurrección; revolución y
contrarevolución; y democracia política y socialismo. Señaló Roitman que es un libro de enorme
actualidad que expone las líneas políticas, las tácticas y las
estrategias de la vía chilena al socialismo e igualmente describe las
maniobras golpistas del Chile de la época, los mecanismos de
desestabilización que hace 40 años acabaron con el proyecto socialista
de la Unidad Popular y que hoy están presentes en países como
Venezuela, Bolivia o Ecuador.
Tras esta introducción, Garcés
realizó una magistral exposición en la que ofreció un análisis político
cargado de reflexiones y anécdotas de su experiencia en primera línea
del proceso hacia el socialismo con Salvador Allende. Lo que se vivió
en Chile en ese tiempo, afirmó, “es quizás la experiencia más avanzada
en el marco de la gran crisis del capitalismo de los años 20, teniendo
en cuenta que la transición al socialismo no es lineal ni unívoca”. Garcés explicó que “siempre la
respuesta que la Unidad Popular encontró en el pueblo chileno fue
superior a las expectativas que los dirigentes tenían”. A su vez,
describió profusamente el carácter de las fuerzas armadas chilenas, en
las cuales aseguró prevalecía una concepción democrático-institucional,
que permitió el inicio del proyecto político socialista. El golpe
triunfó, pero hubo diferentes factores multicausales que influyeron
en ello. Indudablemente, apuntó, las directrices golpistas impuestas por
la administración estadounidense de los republicanos Nixon y Kissinger
jugaron un rol central.
El escritor expuso los paralelismos que a su
juicio existieron entre el golpe de Estado de 1936 en España y el golpe
del 73 en Chile, en particular con las estrategias de insurrección
militar y de deslegitimación del Estado; y también en el modelo de
“transición” aplicado en uno y otro país. Las relaciones con los gobiernos,
dirigentes y movimientos populares en América Latina fueron del mismo
modo descritas por Garcés, al referirse al carácter internacionalista
del gobierno de Allende y su influencia en la región.La experiencia chilena de la
época, para Garcés, aporta importantes datos para los gobiernos
revolucionarios que actualmente en América Latina se enfrentan a la
hegemonía del poder. “Las técnicas golpistas del Chile de 1973 están hoy
presentes en América Latina”, alertó. “En este sentido, lo que 40 años
después esta reflexión sobre los años 70-73 muestra es la necesidad de
encontrar mecanismos nuevos para atajar la dinámica de intentos
insurreccionales golpistas, que encierra graves peligros para la
sobrevivencia de los valores democráticos en nuestra sociedad y en el
futuro”, concluyó Garcés.
Esta actividad dio cierre a un
conjunto de eventos que el CDCVE desarrolló en el mes de septiembre en
homenaje al presidente Salvador Allende, al cumplirse 40 años del golpe
de Estado que lo derrocó.
DdA, X/2.504
No hay comentarios:
Publicar un comentario