Félix Población
Al tiempo que la Asociación de Amigos de las Brigadas Internacionales
(AABI) ha dado a conocer en un comunicado su más enérgica protesta
contra el despropósito contencioso-administrativo de eliminar el
monumento erigido en la Ciudad Universitaria de Madrid a los brigadistas
que lucharon contra el fascismo durante la Guerra de España, me
gustaría aprovechar esta circunstancia para sugerirle a mi estimado Juan
Carlos Monedero que tratase de eludir en lo sucesivo su comparecencia
en programas de debate como los de Intereconomía TV.
Esos cara a cara entre dos antagonistas invitados para debatir sobre un tema que ya de por sí tiene un planteamiento manifiestamente tendencioso -si se es o no partidario de la eliminación de monumentos tanto al franquismo como a quienes se enfrentaron a él-, solo tienen el propósito por parte de los gestores de ese canal de levantar en lo posible sus depauperados índices de audiencia, aunque para ello sea preciso dejar en evidencia -tal como se comprobó en El gato al agua con la presencia del Monedero- la incapacidad del invitado afín a la casa para escuchar a su oponente, o hacerlo a base de risitas y visajes varios de suficiencia y necedad propios de quien suple la falta de rigor histórico o el exceso de fobia hacia los argumentos del contrincante con una falta elemental y democrática de educación.
Asuntos tan serios como el de la memoria histórica -con miles de víctimas del fascismo todavía sin recuperar en fosas y cunetas de todo el país- no merecen debatirse con quienes sólo entienden esa realidad lacerante en un país democrático como una fuente de resentimiento y tratan de obviar esa general masacre en toda la nación -continuada por el dictador una vez finalizado el conflicto armado con cientos de miles de fusilamientos, encarcelados, exiliados y desterrados-, o equipararla con la que se produjo en la localidad de Paracuellos del Jarama en los primeros meses de la Guerra Civil. Sin que ésta pueda justificarse en ningún caso, es de constatar que la capital de la República sufría esos meses un crudelísimo acoso por parte ejercito golpista, con prolongados bombardeos de la aviación nazi que causaron centenares de víctimas entre la población civil, entre ellas 60 niños en la localidad de Getafe el 30 de octubre de 1936, a los que el poeta y Premio Nobel de Literatura Vicente Aleixandre dedicó un estremecedor poema que cuesta mucho encontrar en las antologías.
Destruiré Madrid antes que dejárselo a los marxistas, había dicho el general Franco. Los brigadistas internacionales entraron en combate precisamente para evitarlo, en defensa de la capital republicana, en cuyos frentes centenares de ellos perdieron la vida cuya memoria y homenaje también se pretende hacer desaparecer en la Ciudad Universitaria por razones supuestamente administrativas. Esa simbólica y sobria recordación, erigida muy tardíamente, se halla no muy lejos del ostentoso e imperial Arco de la Victoria, en la plaza de La Moncloa, en uno de cuyos frontones se puede leer una inscripción en latín que reza tal que así: Fundada por la magnificencia regia y restaurada por el caudillo de los españoles, la sede de los saberes de Madrid florece ante la mirada de Dios.
El Arco de la Victoria fue erigido en 1956 y celebra en 2013, después de casi cuatro decenios de fallecido el dictador y casi otros tantos de régimen democrático, el vigésimo aniversario del levantamiento franquista contra el gobierno democrático de la segunda República, que con sus luces y sus sombras fue el primer periodo democrático de la historia de España.
*Artículo publicado hoy también en Público.es
Esos cara a cara entre dos antagonistas invitados para debatir sobre un tema que ya de por sí tiene un planteamiento manifiestamente tendencioso -si se es o no partidario de la eliminación de monumentos tanto al franquismo como a quienes se enfrentaron a él-, solo tienen el propósito por parte de los gestores de ese canal de levantar en lo posible sus depauperados índices de audiencia, aunque para ello sea preciso dejar en evidencia -tal como se comprobó en El gato al agua con la presencia del Monedero- la incapacidad del invitado afín a la casa para escuchar a su oponente, o hacerlo a base de risitas y visajes varios de suficiencia y necedad propios de quien suple la falta de rigor histórico o el exceso de fobia hacia los argumentos del contrincante con una falta elemental y democrática de educación.
Asuntos tan serios como el de la memoria histórica -con miles de víctimas del fascismo todavía sin recuperar en fosas y cunetas de todo el país- no merecen debatirse con quienes sólo entienden esa realidad lacerante en un país democrático como una fuente de resentimiento y tratan de obviar esa general masacre en toda la nación -continuada por el dictador una vez finalizado el conflicto armado con cientos de miles de fusilamientos, encarcelados, exiliados y desterrados-, o equipararla con la que se produjo en la localidad de Paracuellos del Jarama en los primeros meses de la Guerra Civil. Sin que ésta pueda justificarse en ningún caso, es de constatar que la capital de la República sufría esos meses un crudelísimo acoso por parte ejercito golpista, con prolongados bombardeos de la aviación nazi que causaron centenares de víctimas entre la población civil, entre ellas 60 niños en la localidad de Getafe el 30 de octubre de 1936, a los que el poeta y Premio Nobel de Literatura Vicente Aleixandre dedicó un estremecedor poema que cuesta mucho encontrar en las antologías.
Destruiré Madrid antes que dejárselo a los marxistas, había dicho el general Franco. Los brigadistas internacionales entraron en combate precisamente para evitarlo, en defensa de la capital republicana, en cuyos frentes centenares de ellos perdieron la vida cuya memoria y homenaje también se pretende hacer desaparecer en la Ciudad Universitaria por razones supuestamente administrativas. Esa simbólica y sobria recordación, erigida muy tardíamente, se halla no muy lejos del ostentoso e imperial Arco de la Victoria, en la plaza de La Moncloa, en uno de cuyos frontones se puede leer una inscripción en latín que reza tal que así: Fundada por la magnificencia regia y restaurada por el caudillo de los españoles, la sede de los saberes de Madrid florece ante la mirada de Dios.
El Arco de la Victoria fue erigido en 1956 y celebra en 2013, después de casi cuatro decenios de fallecido el dictador y casi otros tantos de régimen democrático, el vigésimo aniversario del levantamiento franquista contra el gobierno democrático de la segunda República, que con sus luces y sus sombras fue el primer periodo democrático de la historia de España.
*Artículo publicado hoy también en Público.es
+@Los cien Paracuellos de Franco: debate en Intereconomía sobre el fraquismo, por Juan Carlos Monedero
+@Tanía Sánchez Molero/García Serrano y el franquismo (vídeo), donde se vuelve a comprobar la capacidad de diálogo de los tertulianos del mismo canal de televisión.
NOTA DE LA ASOCIACIÓN DE AMIGOS DE LAS BRIGADAS INTERNACIONALES
La
diligencia remitida por el TSJM al Juzgado nº 22 de lo
contencioso-administrativo de Madrid ratifica la sentencia inicial de
éste -que declaraba nula la instalación del monumento a las Brigadas
Internacionales- y da a la UCM un plazo de diez días para confirmar la
recepción de dicha sentencia. Una vez remitido el acuse de recibo, el
Rectorado de la Complutense tendrá dos meses para retirar el monumento
colocado frente al edificio de Alumnos del Campus de la Complutense.
El monumento fue promovido por la Asociación de
Amigos de las Brigadas Internacionales, que allegó los medios para su
financiación (la Universidad Complutense, pese a los infundios
propalados por la prensa de derechas, no ha puesto ningún fondo). Su
diseño fue el resultado de la generosa aportación por parte de una
comisión de profesores de la Facultad de Bellas Artes. El recién elegido
Rector de la Complutense, José Carrillo, lo inauguró el 22 de octubre
de 2011, en el 75º aniversario de las brigadas. Ese mismo día llegó la
noticia de que un abogado particular, Miguel García Jiménez, había
interpuesto un recurso contencioso-administrativo contra dicha
inauguración.
El Juzgado nº 22 decidió en aquel momento denegar
la medida cautelar que pedía dicho abogado consistente en paralizar la
instalación, y por tanto la inauguración, de dicho monumento. Pero
tramitó el recurso por la vía ordinaria y emitió su primera sentencia en
abril de 2012, declarando "nula" su colocación en abril de 2012
por carecer de licencia y por haber asumido el Rector "una potestad que
no le corresponde" al no comunicar a los órganos de la universidad la
instalación del mismo.
La sentencia fue inmediatamente recurrida por la
UCM ante el TSJM. Mientras tanto, llegó el informe favorable de la
Comunidad de Madrid respecto a la protección del patrimonio
arqueológico y la UCM solicitó al Ayuntamiento la licencia de obras,
petición que, pese a los plazos transcurridos, no ha sido aún
contestada.
En enero de 2013 fue comunicada a la parte
denunciante la sentencia del TSJM, sentencia que no ha llegado a la UCM
hasta mediados de mayo de 2013, notificando que tenía el plazo de 10
días para dar el acuse de recibo. Esta sentencia ratifica la inicial del
Juzgado nº 22 de lo contencioso-administrativo de declarar nula la
instalación del monumento, argumentando que en la actuación de la UCM
“no se trata de un simple error de procedimiento al tramitar la licencia
o de una deficiencia en el proyecto o en la autorización obtenida,
cuestiones todas ellas de revisión de legalidad, sino de una omisión
total y absoluta de dicho procedimiento". La Universidad Complutense "ha
procedido a realizar una conducta de hecho, la instalación de un
monumento en suelo de dominio público universitario, prescindiendo por
completo de cualquier procedimiento urbanístico que amparase dicha
instalación, que tendiera a controlar sus condiciones".
Desconocemos hasta el momento cuál vaya a ser la
decisión del Rectorado de la UCM, aunque algunas informaciones (ver el
diario El Mundo, 3 de junio) adelantan que José Carrillo no va a retirar
el monumento puesto que ya se pidió la licencia para el mismo,
recordando que algunos otros monumentos, como el del 11-M en Madrid, se
inauguraron sin la licencia previa y no tuvieron ningún problema.
La AABI emitirá pronto un comunicado al respecto,
pero desde ya mismo pedimos a todo el mundo amante de la democracia y de
la justicia que exprese su apoyo escribiendo a nuestras direcciones en
la web, en facebook o en twiter.
+@Los bombardeos sobre Madrid en un relato de Arturo Barea: Proeza
+@Los bombardeos sobre Madrid en un relato de Arturo Barea: Proeza
DdA, X/2.405
3 comentarios:
Creo que los demócratas no deben ir a sus programas u que quienes los hacen se sigan cociendo en su salsa de rencor y resentimiento, sin apenas un historiador digno que acale sus postulados. Ni Monader ni Iglesias ni Tania deben favorcer con su presencia esas cuevas de rencor.
Creo que los demócrtas no deben ir a esos programas y que quienes los hacen se sigan cociendo en su salsa de rencor y resentimiento, sin apenas un jistoriador digno que avale sus postulados. Ni Monedero ni Iglesias ni Tania deben favorcer con su presencia esas cuevas de rencor.
El tratamiento de la memoria histórica en España, además de tardío e insuficiente, ha dejado en evidencia a la propia monarquía constitucional, no podía ser de otra forma cuando esa monarquía obedeció al deseo del dictador.
Publicar un comentario