domingo, 10 de junio de 2007

El obispo Uriarte pide a ETA que revoque su decisión

Lazarillo

Quizá porque durante las jornadas vespertinas del domingo la información deportiva acapara de continuo y en exceso la atención de los medios, la noticia protagonizada por el obispo de San Sebastián, monseñor Uriarte, con motivo de su homilía coincidente con la festividad del Corpus Christi, no ha llegado hasta ahora a las portadas de los diarios electrónicos. Con todo respeto para los profesionales de esos medios, considero la suya una negligencia más que reprochable en las actuales circunstancias, tras el anuncio de ETA de volver a su guerra, porque lo que don Juan María Uriarte ha pedido hoy desde el púlpito a ETA ha sido que rectifique, con todo lo que eso puede comportar como indicación directa y expresa por parte de la máxima jerarquía de la iglesia vasca y todo el calado de incidencia que esa petición implica también en la sociedad de aquel país. Don Juan María Uriarte, que fue mediador en la anterior negociación de la organización terrorista con el Gobierno del PP, se une así a los otros dos obispos de Euskadi en su reclamación a ETA para que revoque su decisión de poner fin al alto el fuego y anuncie el cese definitivo de la violencia. De lo contrario, según palabras textuales del señor obispo de la diócesis donostiarra, incumplirá la voluntad del pueblo vasco y será el de los terroristas un gesto totalitario que sólo admite como calificativo el de rotundo fracaso. Monseñor Uriarte, que acaba de llegar de un viaje pastoral a Angola, defendió con el Evangelio en la mano, desde la catedral del Buen Pastor de San Sebastían, que no existe motivo alguno que justifique moralmente el retorno de ETA a una actividad que reabre las heridas aún no cerradas de las víctimas, produce miedo en los múltiples grupos de amenazados, prolonga indefinidamente la zozobra de las familias cuyos miembros están enrolados o presos, y provoca en el pueblo una sufriente pesadumbre. Me inclino a pensar, ante las declaraciones rotundas y coincidentes de la jerarquía eclesiástica vasca, que no todo está claro en ETA ante la decisión tomada y que si los respetables monseñores solicitan una revocación de ese carácter es porque hay quienes dentro o muy cerca de la banda podrían disentir con el retorno a la lucha armada. Cabe preguntarse quizá si la petición de revocación presagia una escisión en ETA o en su entorno.

RedDiario
CAÑIZARES: LA IGLESIA PARECE COMO HECHA JIRONES
El arzobispo de Toledo, Antonio Cañizares, ha lamentado hoy la división que sufre la sociedad española y ha reconocido que la Iglesia no está suficientemente unida, sino que tiene "tantos grupos y tendencias" que "parece como desgarrada o hecha jirones". Cañizares ha lanzado este mensaje en su alocución a los fieles que pronunció bajo el Arco de la Sangre de toledana la plaza de Zocodover en la procesión del Corpus Christi de este domingo, donde ha planteado que "a veces los que con mayor razón deberíamos dar ejemplo de unidad no lo damos suficientemente".
El País.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Aunque antaño la haya practicado, es obvio que la iglesia Católica ha de condenar la violencia, proceda de donde proceda. Habiendo ofrecido a los violentos la posibilidad de reclamar pacíficamente lo que reivindican esparciendo el terror entre los ciudadanos, queda sin base la defensa de la existencia de una banda armada y eso la Iglesia lo sabe. En cuanto a esa división a la que hace referencia Su Eminencia el Cardnal Primado solo he de decir, con el Evangelio en la mano: "Todo reino contra sí dividido no subsiste". Tomen debida nota tanto los unos como los otros.

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