viernes, 15 de diciembre de 2006

La COPE de la Iglesia no es la Iglesia

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Félix Población

No hace mucho, los obispos catalanes no tenían reparo en denunciar por incompatible con el pensamiento cristiano la actitud editorial e informativa de la cadena COPE, propiedad de la Conferencia Episcopal Española. El pasado miércoles, monseñor Blázquez, presidente de esa respetable institución, aseguraba que la Iglesia no es la COPE, en coincidencia con monseñor Sebastián, para quien esa emisora no representa el punto de vista de la Iglesia.

No coinciden los mentados criterios, sin embargo, con el de monseñor Amigo, entrevistado en Cuatro TV por un timorato y recatado Gabilondo, capaz de afirmar sin titubeos que la COPE es una bendición de Dios, con lo cual cabría inferir que la bendición divina es ajena a la Iglesia, a juzgar por lo que ha expuesto don Ricardo Blázquez

Según el señor obispo de Bilbao, la incidencia de la católica iglesia en la programación de su empresa mediática más caracterizada se limita a los tres espacios dedicados a la información confesional que diariamente ofrece dicha cadena de emisoras. El resto de lo que se presenta a la pública escucha viene a ser, según monseñor Blázquez, una prueba de que la Iglesia es muy respetuosa con el ejercicio de la libertad.

Tal afirmación, como las precedentes a cargo de sus colegas, peca de manifiesta hipocresía y es además un insulto en toda regla a la percepción e inteligencia de cuantos españoles no comulgan con el espíritu y la letra zafios, falaces, vejatorios, insidiosos y provocativos de varios de los programas de la COPE de cuyo nombre, así como del de quienes los dirigen, no es preciso hacer más publicidad gratuita de la que ya se les ofrece desde diversos medios.

Sostiene el presidente de la Conferencia Episcopal que la capacidad de decisión de quienes elaboran y presentan esos programas y su agresiva oferta opinativa e informativa diarias se deben al escrupuloso celo conque la empresa eclesial se ciñe a la libertad de expresión de sus profesionales.

Toda España sabe, empero, con una representación minoritaria pero muy ponderada del obispado incluida, así como de la feligresía más sensata, que esa libertad de expresión se limita en la COPE al activismo político de la derecha más pura y dura, afín al sector más retrógrado del Partido Popular, y en contra incluso del propio don Mariano Rajoy cuando éste no se atiene a los postulados más reaccionarios que pregonan los adalides de la emisora.

Monseñor Blázquez sabe muy bien que la Conferencia Episcopal, en tanto que propietaria de esa cadena de radio, no se puede sustraer a las responsabilidades que como empresa tiene en la gestión y difusión de cuanto en ella se programa. Mientras, y en tanto no la venda, la COPE de hoy es la obra más sectaria e incivil que la católica iglesia tiene en ejercicio desde los tiempos en que prestó palio al Caudillo de España.

RedDiario

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SIMILITUDES ENTRE LA DERECHA CHILENA Y EL PP
Hasta que la derecha chilena y la derecha española no rompan con Pinochet y con Franco respectivamente, asumiendo que fueron dos dictadores de ideología básicamente fascista -a pesar de que ambos la disfrazaran, como el lobo se disfrazó de Caperucita- no se habrán normalizado del todo ambos países. Es decir, hasta que no expulsen a los sectores de extrema derecha instalados en el interior de ambas derechas. La derecha es una cosa; el neonazismo o los neocon, otra bien distinta.
Enric Sopena, El Plural.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Hay dos iglesias en España, una ampara al nacionalismo español y otras a los respectivos nacionalismo catalán y vasco. Como para acogerse a cualquiera de ellas.

Anónimo dijo...

Lo mejor es que la iglesia estuviera en su sitio, al margen de nacionalidades y regiones, pero ese sitio que es el del Evangelio sólo suele adoptarlo la Iglesia que está presente entre los más pobres.

Anónimo dijo...

¿Como que libertad de expresión? La única iglesia que manda en la COPE es la de la libertad de presión contra el gobierno.

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