Telesur llega a Europa

Lazarillo

Con frecuencia sintonizo Telesur a través de Internet, pues ningún medio como este canal para tener una información próxima, certera y distinta de Iberoamérica, ajena a los intereses políticos y económicos que priman en las agencias internacionales, las cadenas multinacionales de televisión y los grandes diarios, constreñidos por lo general al ofrecimiento de aspectos muy superficiales o tendenciosos de la rica y compleja realidad latinoamericana. La necesidad de un medio como Telesur se imponía como objetivo insoslayable en la interesante e inquieta perspectiva geopolítica actual del subcontinente.

Cierto que a Telesur, como a cualquier empresa comunicacional de recién iniciada trayectoria y ambiciosos objetivos en su horizonte, le son indispensables aún algunas ampliaciones de nuevo registro y no pocas correcciones en su programación y diseño mediático para hacer más seductora la que de momento es ya de por sí una interesante propuesta. Sobre todo si como parece y es de obligado cumplimiento pretende ampliar su audiencia e incidencia social mucho más allá del natural ámbito de difusión que substancialmente abarca.

En ese sentido he leído hoy, merced a un artículo de don Pascual Serrano, que en el citado canal ejerce como cualificado editorialista, que Telesur ya se podrá ver en Europa gracias a la mediación del colectivo Arcoiris que ha subido la señal al satélite Hot Bird 7. Esa notable apertura de miras desde el viejo continente, teniendo en cuenta sobre todo que España debería figurar en un lugar receptivo prioritario por razones de lengua y cultura, sin duda la tendrá en cuenta la directiva del canal para operar con prontitud y eficacia en pro de una imprescindible orientación vinculativa de aproximación y reconocimiento de nuestros dos mundos, algo que en este país seguimos echando de menos.

Si esa alianza comunicacional con España y Europa -donde tampoco falta el interés por una Iberoamérica mediáticamente distinta- se diera desde Telesur con la dignidad, sensibilidad e inteligencia que ofrecen muchos de los grandes reportajes presentados por ese canal acerca de la realidad popular y cotidiana de Latinoamérica, los positivos efectos de ese reconocimiento serían comprobables y la trascendencia y la amplitud de repercusión del canal iberoamericano como medio internacional de prestigio quedaría sin duda ratificada.