Javier de la Puerta/Jerusalén
En las últimas semanas, los ataques a conductores de autobús palestinos en Jerusalén se han vuelto habituales, sin que la policía de Israel haga nada para defenderlos. No es algo novedoso.
El pasado martes jugaron un partido de fútbol de la liga los equipos Beitar Jerusalem contra Bnei Sahnin, este último un equipo árabe-israelí de Galilea. Era seguro que al finalizar el partido los forofos de Beitar Jerusalem, conocidos por su racismo, iban a atacar a los conductores palestinos con los que se encontraran. En el mismo campo ya agredieron con botellas al menos a un jugador del Bnei Sahnin, que resultó herido. No se diferencian mucho de los fanáticos y racistas ultras sur españoles y de otros países.
"Standing Together" organizó una guardia humanitaria-solidaria para evitar esta violencia. En las inmediaciones del Estadio Teddy subimos a una docena de autobuses, con conductores árabes, para intentar impedir con nuestra presencia e interposición agresiones de los forofos del Beitar contra los conductores árabes-palestinos.
Seguramente existen, pero yo no conozco actuaciones de la sociedad civil para impedir la violencia de los ultras sur de otros lugares.
DdA, XXI/6201
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