Lazarillo
Se podría interpretar lo que sigue como propio de quien le tiene al Gran Wyoming una cierta ojeriza, envidia o aversión ideológica. Les puedo asegurar que para nada. Me parece una persona inteligente, capaz de elaborar un pensamiento crítico muy lúcido y exponerlo con rotunda sencillez. Como profesional de la televisión, además, es un presentador que se ha ganado un meritorio primer lugar, merecedor de ese Premio Ondas que se le acaba de conceder creo que por segunda vez y que Wyoming recogió con una alocución breve pero imprescindible en los tiempos que corren, ante la proliferación del periodismo basura o, si se prefiere, del bulo o la patraña. A este Lazarillo le hubiese gustado que lo que dijo el presentador de El Intermedio en Barcelona, lo hubiese adelantado cuando tuvo ocasión para ello y el periodismo de la patraña afectaba al director de la propia empresa (La Sexta, Ferrerasgate) en la que presta su servicios el Gran Wyoming con su interesante programa y buen equipo, dirigido por Carmen Aguilera, de indudable prestancia satírica desde hace veinte años (Ferrerasgate). Ese discurso del Ondas sería más valioso aún si se mantuviera en todo lugar y circunstancia.
DdA, XXI/6183
2 comentarios:
Así es, pero discursos como ese (también por el reconocimiento de que és es un simple presentador que pone la cara y la gracia, pero todo lo demás es obra del equipo dirigido por Aguilera) son valiosos en cualquier momento y lugar en estos tiempos de validación de la mentira como arma estratégica... Igual pedirle que critique abiertamente a "enseñas" de la casa en la que lleva dos décadas trabajando (sin mentiras y con aparente libertad) es demasiado... Entre otras cosas, supondría la salida inmediata de uno u otro del medio (aunque es evidente que ninguno de los dos tendría problemas para encontrar trabajo).
De acuerdo, pero mantenerlo es más útil y sobre todo más creíble en todo lugar y circunstancia.
Publicar un comentario