Lazarillo
El actual Jefe del Estado del reino España, reinstaurado por el dictador Francisco Franco y aliado de Hitler en la Guerra Civil, acudió al escenario donde fueron asesinados más de 4.000 republicanos españoles por el régimen nazi: el campo de exterminio de Mauthausen. Sólo falta que la Fiscalía de Derechos Humanos y Memoria Democrática de nuestro país, que acaba de abrir diligencias para esclarecer la posible existencia de una estrategia entre el dictador Francisco Franco y el régimen nazi en la detención y traslado de miles de republicanos españoles a los campos nazis, certifique esa relación. De ser así, la presencia de Felipe VI y su esposa en ese lugar se colmará aún más de desvergüenza histórica. Por suerte, ninguno de los ciudadanos españoles -apátridas para el general Franco- que estuvieron internados en esos campos está ya entre nosotros. De la repulsión que sentiría ante esta imagen sólo le sería reconfortante observar la bandera tricolor que, a unos pasos de la real pareja, ondea como testimonio de la dignidad y memoria de los miles de compañeros que fueron asesinados por defender la libertad en España y en Europa. Esa libertad que siempre estará amenazada por los mismos, tal como estamos volviendo a comprobar.
PS. Los Reyes abrazan la memoria republicana, ha titulado hoy el diario El País.
DdA, XXI/5.984
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