Félix Población
Es siempre de celebrar que se recuerden los libros necesarios de nuestra memoria histórica, sobre todo aquellos que, como es el caso, se escribieron para dejar constancia de la desesperada diáspora de los españoles republicanos que se vieron obligados a abandonar su país ante el riesgo de ser represaliados por la dictadura franquista, que tanto celo e inquina, y por tanto tiempo, puso en la persecución y represión de los vencidos.
Este es el caso de la novela Las hogueras de El Pertús. Diario de la evacuación de Cataluña, de la que es autor el dramaturgo catalán Álvaro de Orriols, fallecido en Bayona en 1976. El autor, poeta, músico y escritor formó parte de los cientos de miles de refugiados que, en compañía de su familia en su caso, cruzaron la frontera con Francia en enero de 1939. El libro, además de recrear literariamente las vivencias y circunstancias experimentadas en el camino hasta el internamiento de los exiliados en los campos de concentración franceses, cuenta con los dibujos que hizo el autor para ilustrar su narrativa. Como posiblemente ocurriera con la maleta de Antonio Machado en estas mismas circunstancias, Orriols perdió en este tránsito todas sus obras inéditas.
Este libro de menos de 200 páginas de Orriols, al que se le considera el precursor del teatro popular en Cataluña con libretos en verso cuya puesta en escena fue muy celebrada en los años treinta como Rosas de sangre (El poema de la República), Máquinas (Drama social antibélico), España en pie y Retaguardia (estrenadas durante la guerra), fue presentado ayer en Oviedo en una versión de cómic de la que es autor Alberto Vázquez García. Me limito a dar noticia del libro por no haber tenido hasta ahora la oportunidad de leerlo.
Dibujo donde se ve a la familia y al autor agotados del camino
El hecho de que un libro originalmente ya ilustrado por Álvaro de Orriols, entre cuya pluralidad de facultades también estaba la de habar siete idiomas, haya servido de base para contarlo exclusivamente así, y que se trate asimismo de una obra con el contenido indicado, es algo que merece resaltarse. Falta hace que sirva para facilitar el conocimiento de uno de los episodios más dramáticos de nuestra memoria democrática entre las jóvenes generaciones. Las hogueras del Pertús y otros relatos del éxodo y la muerte de España en los campos de concentración de Francia no debería faltar en ninguna de las bibliotecas y centros públicos de enseñanza de este país. Máxime ante el escoramiento ideológico de un sector cada vez más creciente y ciertamente preocupante de la mocedad hacia los partidos retrógrados.
Buena parte de estos jóvenes desconocen lo que a estas alturas ya deberían haber asimilado a través de su educación porque forma parte de la historia vivida por medio millón de españoles. Para esto habría sido preciso, como contó Mercedes Orriols, que sellos como Planeta no se hubieran negado a publicar el libro de su padre en 1978 porque no formaba parte de su línea editorial. La obra se publicó primero en París, en 1995, y en 2008 Manuel Aznar Soler hizo una cuidadosa edición en castellano, con una documentada introducción. Seis años más tarde se publicaría la edición en catalán.
Que libros tan imprescindibles como este y otros -siguen faltando- hayan llegado tan tarde a las editoriales españoles, hacen posible -junto a otros factores de índole política- que la desmemoria democrática de los más jóvenes los conduzca a aquellos partidos que están en contra de esa memoria y son herederos de quienes acabaron con ella hace 85 años.
DdA, XX/5.782
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