Félix Población
Leo la noticia en el diario La Razón, con la redacción propia de un periódico servil con los intereses políticos del gobierno que la protagoniza, que no es otra que el de la Comunidad de Madrid. Como el ministro de Cultura del gobierno de España ha sido muy tajante hace cuatro días, asegurando que mientras él gestione ese departamento no habrá dinero para la tauromaquia*, la réplica por parte de la presidenta Ayuso no podía ser otra que otorgar uno de los Premios de Cultura, en su vigésimo tercera edición, a la Escuela de Tauromaquia José Cubero “Yiyo” por su contribución al "arte taurino". Se pretende con ello "subrayar -leo en el citado diario- su labor en la formación de jóvenes talentos taurinos, consolidando su lugar como uno de los pilares fundamentales en la preservación de la tauromaquia en la región". Supongo que la noticia habrá sido del gusto de quienes aparecen en la fotografía, cuyo autor se desconoce, y parece que tiene por escenario el tendido de la Plaza de Toros de Bilbao hace unos años. Una de las hijas del rey huido aparece con él y dos de sus nietos, dejando para la posteridad la jubilosa estampa de su afición taurina y alegría del potentado vivir. Como acabamos de saber, el rey que robó ya tiene una fundación en Abu Dabi, a modo de artefacto financiero para burlar a Hacienda y para que su patrimonio en el extranjero quede entre los suyos, siguiendo la tradición borbónica. Es recomendable también para quienes celebren con vítores y aleluyas la cultura que premia el gobierno de Ayuso, siguiendo la tónica del rey felón Fernando VII hace dos centurias, comprobar en El Diario de hoy las transcripciones de las llamadas desesperadas de los familiares y el personal de la residencias de la Comunidad de Madrid al teléfono de emergencias, en las primeras semanas de la pandemia de COVID, para comprobar la existencia de un protocolo de exclusión en el que se encontraban esos centros. El balance no debemos olvidarlo nunca, aunque haya mucho electores que lo hagan reiteradamente ante las urnas: más de siete mil ancianos fallecidos, víctimas de una muerte cruel en la soledad de su habitaciones, en los dos primeros meses de la pandemia.
*Para colmo, la Concha de Oro del Festival de San Sebastián se la ha llevado este año una peli protaurina.
PS. Volviendo a la fotografía, sería conveniente que el autor de la misma fuera identificado para que la historia reconozca la oportunidad de su perspicacia.
DdA,XX/5.784
No hay comentarios:
Publicar un comentario