Félix Población
Es muy probable que cuando pasen lo años sólo se recuerde el medallero de España en la edición de los Juegos Olímpicos celebrados este año en París, como suele ocurrir normalmente con este tipo de competiciones, pero quienes pretendemos tener en cuenta otros valores que deberían siempre resaltarse en el deporte y en la vida, no podemos dejar de consignar y admirar el comportamiento solidario que ha tenido el deportista más laureado de nuestro país después de conseguir su sexta medalla en unos Juegos Olímpicos. Lo primero que hizo Saúl Craviotto, nada más colgarse la medalla de bronce después de una reñidísima pugna en la especialidad de K$ 500, ha sido acordarse de otra de nuestras deportistas laureadas, Carolina Marín, que no pudo lograr esta vez su objetivo al sufrir una grave lesión en la rodilla en el transcurso de su partido de bádminton. Duele ver las imágenes cada vez que tenemos oportunidad, mucho más sabiendo las aspiraciones fundadas que tenía la deportista onubense para revalidar sus pasados éxitos. Saúl Craviotto, con sus 39 años de edad y la posibilidad de que estos sean sus últimos Juegos Olímpicos, se ha despedido del modo más ejemplar que puede hacerlo un deportista con su admirable trayectoria: "Me gustaría dedicarle un poquito de esta medalla a Carolina Marín". Obviamente, la deportista española agradeció a Craviotto su recuerdo con estas palabras: "Enhorabuena, Saúl Craviotto. Ya eres el medallista español con más medallas en los JJOO. Pero tu figura como deportista va mucho más allá de lo que has ganado (y mira que has ganado). Gracias por acordarte de mí en un día como hoy". En medio de tantos egos e intereses como mueven este tipo de competiciones, y moviéndonos en una sociedad que rinde a su vez tributo a otros valores más mezquinos, el gesto de Craviotto ha sido lo mejor de España en París, incluso por encima de haber hecho historia por ser el deportista español con más medallas olímpicas. Un país con deportistas como él y Marín debería ser también mucho mejor y no ofrecer espectáculos tan lamentables como el ofrecido estos días por el huido, retornado y desaparecido ex-president de la Generalitat de Catalunya.*
*Celebro mucho que la operación quirúrgica a la que ha sido sometida Carolina Marín en su rodilla haya sido satisfactoria.
DdA, XX/5.732
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