Félix Población
La señora presidenta de la Comunidad de Madrid sólo ha querido debatir, con el resto de candidatos al cargo que ocupa, en su televisión, Telemadrid, negándose a hacerlo en cualquier otro canal. Ignoro si lo ha justificado con algún tipo de argumento o si se ha limitado a actuar así por su real gana, pero lo que denota esa actitud es algo que ya sabíamos de su proceder y de su ignorancia.
Esta señora desprecia ese tipo de debates, desprecia a quienes pueden estar interesados en seguirlos y, por lo tanto, a la democracia en la que es posible, sano y elemental el debate de ideas en los medios de comunicación. Con ser eso grave en quien representa como presidenta a la comunidad autónoma, hay otra particularidad que lo hace aún más deplorable: que la señora Ayuso desprecia la democracia por preservar su ignorancia, ineptitud y falta de ideas y argumentos para enfrentarse a los de sus adversarios políticos.
Ayer en Telemadrid quedó bien patente que la única consigna recibida de su consultor político era utilizar el nombre de ETA, una organización terrorista que lleva más de un decenio muerta y bien muerta. Lo hizo Ayuso para justificar el voto a su partido: “El 28 de mayo va de votar el modelo ambicioso del PP o votar a ETA”, dijo sin que en su voz ni en su rostro asomase el más mínimo rictus de arrebolada vergüenza.
Lo malo, pensará quien busque alguna razón para tamaño despropósito, es que una formulación tan peregrina y falaz no se hace a humo de pajas. La realidad es que, aunque nos cueste admitirlo al día de hoy, entre el electorado madrileño hay un sector de la sociedad, el que abreva en las cloacas mediáticas y se nutre de sus detritus, que se cree esoo a pies juntillas.
Es el mismo sector que no se cree lo del hermano de Ayuso y su pingüe comisión por un contrato de material sanitario con el gobierno regional. Como tampoco se cree la responsabilidad que le corresponde a la presidenta madrileña por los miles de ancianos muertos en las residencias en la primera fase de la pandemia de COVID. Ayer vimos la reacción de Díaz Ayuso cuando la candidata de Podemos-IU le entregó el libro de su exconsejero Alberto Reyero Morirán de forma indigna. "No invada mi espacio" fue lo único que pudo decir visiblemente azorada quien firmó unos protocolos para que el título de ese libro fuera cierto y el exconsejero de Ayuso tuviera la dignidad de demostrarlo con su contenido.
DdA, XIX/5.352
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