viernes, 27 de enero de 2023

¿SE PUEDE CREER EN UNA DERROTA DE RUSIA SIN QUE LA UNIÓN EUROPEA LO PAGUE CARO?


Félix Población

Aunque haya quien se la atribuya a otros, la verdad es que quien primero hizo uso de la frase “la primera víctima cuando llega la guerra es la verdad” fue el senador estadounidense Hiram Johnson en 1917 durante el primero de los grandes conflictos armados que tuvieron lugar en nuestro planeta, aquella gran masacre a la que acudieron con ciego e iluso ardor guerrero millones de soldados. 

Como aquella terrible tragedia no le sirvió al ser humano para sacar consecuencias de lo peor de sí mismo, fue Winston Churchill quien hizo una nueva versión de la frase de Johnson durante la segunda Guerra Mundial, varios decenios después: “En tiempos de guerra la verdad es tan precioso que debería ser protegida por un guardaespaldas de las mentiras”. 

Más empleada la primera que la segunda, cada vez que asistimos a un conflicto armado, es lo cierto que, siendo los nuestros los tiempos de la comunicación, la guerra entre Ucrania y Rusia está dejando tras de sí una interpretación mediática del conflicto en nuestro ámbito occidental a merced de los que disponga la OTAN y su propietario, Estados Unidos, sin que tengan apenas peso los criterios que, como sería de rigor, reparten las culpas entre el país invasor y el invadido. 

No se puede acosar a Rusia con bases militares, tratando de incorporar Ucrania a la OTAN, ni Rusia debería haber cometido la temeridad de invadir un país soberano. Por eso, una vez desatado el conflicto, lo sensato sería hacer todo lo posible por establecer los vínculos diplomáticos necesarios para poner fin a las penalidades que viene sufriendo la población civil ucraniana y los cinco millones de refugiados que se vieron en la necesidad de abandonar su país. 

Que otra vez potentes tanques alemanes, como lo hicieron en su día los carros de combate nazis durante la segunda Guerra Mundial, vayan a surcar beligerantes aquellas tierras, me parece una innecesaria escalada en la guerra que podría comportar el más graves riesgo de conflicto nuclear desde la Guerra Fría, algo que a los fabricantes de armas les debe resultar muy estimulante. 

Solo a la izquierda del PSOE hemos encontrado la postura más convincente para evitar ese riesgo. Tanto en la mayoría de los medios de comunicación como en los dos partidos mayoritarios se sostiene la insensatez de que la paz solo se puede ganar armando más y más a Ucrania, como si allí no creciera la destrucción y la muerte cada día y se creyera que una derrota de Rusia, el país con mayor potencial nuclear armado del planeta, no tendría un muy duro coste para la Unión Europea, que la dejaría aún más a merced de Estados Unidos.


Dedicado a quienes comercian y se forran con el armamento y a quienes consideran que a base de más armamento se está más cerca de la paz, ignorando el conflicto humanitario que comporta todo conflicto bélico y una mayor escalada armada en el de Ucrania. 

     DdA, XIX/5.360     

1 comentario:

Anónimo dijo...

¿SE PUEDE CREER EN UNA VICTORIA DE RUSIA SIN QUE LA UNIÓN EUROPEA LO PAGUE “AÚN MÁS” CARO?

Según tú, la cesión de armas para la defensa de Ukrania se sitúa como “el más graves riesgo de conflicto nuclear desde la Guerra Fría”… ¿Y la ofensiva armada, criminal, sangrienta de un país soberano… no lo ha sido? ¿Se te olvida, quizás, quiero creer que inconscientemente, quien ha iniciado la guerra?

“…lo sensato sería hacer todo lo posible por establecer los vínculos diplomáticos necesarios…” Bonito “brindis al sol”, digo “a Putin”… ¿Ofreciéndole “la otra mejilla”?; ¿el Donbás supongo, amén de Crimea? O… ¿alguien puede creer que, después de tal despliegue militar, de tantas pérdidas humanas y materiales, aceptaría volver a las fronteras prebélicas?

“Rusia, el país con mayor potencial nuclear armado del planeta”. Desgraciadamente. Y si consigue sus objetivos en ésta, ¿se va a “desarmar”? ¿Cuál sería, llegado el caso, la próxima amenaza? ¿Los países bálticos? ¿Otra vez Polonia, quizás? ¿La reconstrucción de “su” Telón de Acero..? ¿Y la propia ciudadanía rusa, hasta ahora al margen de la guerra (salvo los desgraciados implicados directamente en ella), ignora que cualquier agresión nuclear a otro estado la pone también directamente en el punto de mira? La amenaza de Putin es también una amenaza directa a sus ciudadanos. Y la respuesta contundente y unitaria europea es el único camino para poner fin a esta barbarie: la reducción del magnicida por su propia gente.

El “expansionismo” militar, desgraciadamente, y ¡venga de donde venga!, sólo se detiene parándole los pies ¡Y cuanto primero, mejor!

“Solo a la izquierda del PSOE hemos encontrado la postura más convincente para evitar ese riesgo.” ¡Ahí, Cruzado de La Paz!, encuentro por fin tu lógica. Reorientando votos, supongo… Como tú bien citas, “la primera víctima cuando llega la guerra es la verdad”. Y, al respecto, lo de la comparativa de conflictos y “los tanques alemanes”… los del Fhürer… los de la Alemania fascista.. ¿no era entonces ésta la que había iniciado la guerra? ¿O sólo recuerdas de la historia los detalles que te interesan? ¡Valiente demagogia..!

Comparto, habitualmente, muchas de tus opiniones… pero, en este caso, y bien que lo lamento, me siento defraudado con tu… “pacifismo de salón”, por no decir otra cosa… Igual es que, sin yo saberlo, mi interpretación del conflicto se sitúa “a merced de lo que disponga la OTAN y su propietario…” ¡Vaya por Dios! Tendré que comprobar mañana si se ha engrosado mi cuenta corriente.

(Dedicado a quienes consideran que entregando al Invasor los territorios sanguinariamente ocupados se está más cerca de La Paz.)

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