Alejandro Álvarez
Hace unos días el telediario de TVE promocionaba el libro de un príncipe que, con un contrato de 20 millones de euros, publicaba un texto en el que va a "aportar" cotilleos sobre una familia real muy pomposa. Ayer, el telediario de TVE dedicaba varios minutos a contarnos los cotilleos cantados por Shakira sobre su ex, otro rico famoso y con bastante poco sentido ético. Cada vez de forma más ostensible TVE en sus telediarios está abandonando la información para entregarse a los cotilleos. Conseguir que el paisanaje centre sus desvelos en las cuitas de los ricos y se olviden de las propias es una propaganda sutil (y perversa), pero muy rentable. Sobre todo para los ricos, que consiguen sus objetivos esenciales de una tacada: lograr que los pobres no cuestionen sus privilegios, por un lado, y engrosar cuantiosamente sus ya jugosas cuentas bancarias, por otro. Ayer el vídeo de la rica y famosa Shakira con sus vísceras al aire contra otro rico famoso llegaba a los 27 millones de visualizaciones y centraba los comentarios de la mayoría social. Hoy se habrán doblado. Por su parte, el príncipe pomposo se va a embolsar 20 millones de € por sus libros de cotilleos promocionado por TVE. Seguramente ambos se van engrosar en unos meses más de lo que un trabajador con sueldo medio ganaría en varias vidas laborables. Lo que sucede en TVE no es casual sino interesado y buscado.
NOTA: Esto que sucede en la televisión pública, pagada con el dinero de nuestros impuestos, es indignante. Los que sucede en los grandes medios privados es sencillamente vomitivo.
DdA, XIX/5.349
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