El día 14 del pasado mes de octubre Gerardo Iglesias, persona con una dilatada trayectoria sindical y política, por lo que pasó varios años en la cárcel, pese a su precario estado de salud dio un paso adelante y al lado de sus hijos y un pequeño número de personas amigas llevó a cabo una rueda de prensa para dar a conocer su situación y exigir justicia.
Desde el primer momento tanto él como quienes lo acompañamos quisimos dejar claro que el problema de la sanidad pública y de las listas de espera no afectaban solamente a Gerardo si no también a las más de 23.000 personas que estamos esperando que nos atiendan en los diferentes hospitales asturianos.
Pese a haberlo dejado claro desde el primer momento fueron algunas personas las que nos criticaron acusándonos de movilizarnos porque se trataba de un personaje público. También es cierto que, de muchas y variadas maneras, fueron una gran multitud de personas quienes nos manifestaron su apoyo con su firma como habíamos solicitado.
A la semana de esa rueda de prensa y tras una llamada de teléfono yo mismo dirigí una carta a la Consejería solicitando una reunión a la que, en representación de Gerardo, asistiríamos sus hijos y yo mismo e iríamos acompañados por el doctor Carlos Ponte Mittelbrun.
Pasó el tiempo y no obtuvimos respuesta pero, sin embargo continuamos con nuestra presión porque estamos convencidos de que Gerardo tras cinco operaciones (y más de 8 años de espera para una nueva operación) no se merece convivir con un sufrimiento atroz que sólo los más próximos conocemos.
Tras innumerables gestiones (Defensor del Pueblo incluido) hace unos días que recibimos la noticia tan esperada, el próximo jueves día 22 Gerardo Iglesias ingresará en el HUCA y en la mañana del viernes 23 será operado.
Queremos entonces desde aquí, en nombre de Gerardo, de sus hijos y en el mío propio agradecer a todos esos cientos de personas (prácticamente mil) que con su firma apoyaron esta lucha que, insistimos, no sólo es la de Gerardo si no la de toda la sociedad asturiana, sean pacientes o sus familiares.
Sólo queda ahora esperar que la capacidad profesional de los especialistas, algo que jamás se puso en duda, permita que el tiempo por vivir que le queda a Gerardo Iglesias (77 años en la actualidad y diagnosticado de parkinson) sea lo más llevadero posible.
MUCHAS GRACIAS
DdA, XVIII/5.333
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