martes, 20 de diciembre de 2022

TELE PÚBLICA: UNA COSA ES EL ENTRETENIMIENTO Y OTRA LA OBSCENIDAD

Aparte de compartir lo que dice Bernaldo de Quirós en este comentario, creo que estamos una vez más ante el desprecio que la televisión pública tiene actualmente al conocimiento y difusión de nuestra historia más próxima. Una cosa es remontarse a los tiempos del imperio, con series de más que dudosa calidad, que mantener la que bajo el título de El Ministerio del Tiempo podría elegir asuntos más cercanos relacionados con nuestra Memoria Democrática. Recientemente, el autor del libro "14 de abril", Paco Cerdá -que espero leer en breve-, manifestaba que la proclamación de la segunda república en esa fecha es toda una película. A nadie hasta ahora se le ha ocurrido contar en cine lo que representó ese día en la historia de este país, aunque este Lazarillo y muchos españoles sepamos, por los que nos contaron nuestros padres y abuelos, que no habrá una fecha que haya levantado tantas esperanzas. Cerdá nos lo acaba de contar al detalle y desde la calle, por si algún cineasta se siente atraído para llevar a la pantalla un guión que recree, versione o se base o tenga en cuenta el interesante y en buena parte inédito contenido documental del libro.


Vicente Bernaldo de Quirós

Me entero, a través de su propio creador, Gerardo Olivares, de que la serie El Ministerio del Tiempo, que tan buena audiencia ha cosechado y tanto éxito popular tuvo, no seguirá en RTVE, por razones poco claras.
No solo es una pena, sino también una estupidez que la televisión pública estatal rompa su cordón umbilical con un programa que es un referente en las preferencias de los españoles y que es una especie de distopía muy bien formada sobre importantes acontecimientos de la historia de nuestro país.
Reconozco que El Ministerio del Tiempo es un programa que me agrada, pero, aparte de mis gustos, muchos españoles conectaron con una serie entretenida y que ofrece conocimientos en materia de cultura.
Creo que la tele pública española anda un tanto despistada. Obvia un programa como El Ministerio del Tiempo y promueve otros de dudosa calidad y contraproducente con los postulados de un medio de comunicación de titularidad estatal como Masterchef, para mayores, y lo más obsceno para niños o ese bodrio de Duos imposibles. Una cosa es el entretenimiento y otra la algarada. Cada día nos sentimos más huérfanos de la coherencia de los medios públicos y de un alimento cultural.

DdA, XVIII/5.332

No hay comentarios:

Publicar un comentario