martes, 29 de noviembre de 2022

EL HUMANISMO MEXICANO: ¡QUE VIVA MÉXICO, CARAJO!



Félix Población

Gracias a la información aportada en la apertura de los telediarios de la televisión pública estatal, hemos tenido noticia ayer de las manifestaciones de protesta que están teniendo lugar en China por el confinamiento a que está obligada la población a causa del COVID. Por la corresponsal de ese medio en Pekín hemos sabido también que han sido centenares de personas las que han salido a la calle.

No mereció ese mismo tratamiento la manifestación multitudinaria que se celebró el pasado domingo en México -país al que se debería tener más en cuenta en el nuestro-, en apoyo del gobierno del presidente López Obrador. Posiblemente ningún primer mandatario en el planeta puede lograr que un millón doscientas mil personas se reúnan en un escenario urbano (el Zócalo de la capital federal) para respaldar la política desarrollada por el ejecutivo en el pasado cuatrienio. 

Hasta 110 razones expuso López Obrador para dar fe del proyecto transformador de su país y proseguir con el mismo hasta el final de la legislatura. Incluso algún diario de la oposición como Excelsior reconoció que el apoyo al presidente se ha incrementado en dos puntos a lo largo de su mandato como consecuencia de su buena gestión. 

La economía mexicana no deja de crecer, crecen las inversiones en el país, se está combatiendo eficazmente la gran lacra de corrupción, la política de empleo ha dado trabajo a más de un millón de personas, el salario mínimo ha crecido en más de un 60 por ciento y se duplicará en los próximos veinte meses, lo mismo ocurre con las pensiones y con la inclusión de  estas para los mayores y discapacitados en el texto constitucional, se está acometiendo en el país la reforestación más extensa del planeta, México será energéticamente autosuficiente al término del mandato de López Obrador…

Tal como ocurre siempre con las reposadas alocuciones del presidente mexicano, este se hizo entender con cifras y no se resistió al término de su discurso a calificar el impulso que mueve a su gobierno de humanismo mexicano, con la ciudadanía más desfavorecida como prioridad y también aquellos territorios que más lo necesitan. 

Sin embargo, en la crónica firmada por el corresponsal del diario El País en México, ocupan más espacio tipográfico las opiniones de los partidos de la oposición, que la semana pasada no pasaron de reunir a 12.000 personas en el Zócalo, que el propio contenido del discurso presidencial y la más multitudinaria manifestación celebrada en la historia de un país al que tanto debe la historia democrática del nuestro.

DdA, XVIII/5.316 

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