domingo, 6 de febrero de 2022

EL PERIODISMO DEBE DESTERRAR OBLIGATORIAMENTE ESE TONO QUE INVITA AL ODIO

Muy recomendable, como los artículos del propio entrevistador, la entrevista que mi estimado colega Víctor Guillot publica hoy en Nortes con el periodista José Luis Argüelles, a propósito de la edición de un libro en el que hace una selección de los artículos que Argüelles firmó en el diario La Nueva España y que ahora sale a la calle con un título muy afortunado: El callejón de las fieras. Prosas de aquellos daños (2012-2016), que el autor explica en la interviú. El periodismo tiene la obligación de desterrar ese tono que invita al odio, afirma el periodista mierense. Deberíamos saber lo que nos jugamos no haciéndole caso:


José  Luis Argüelles (Mieres, 1960) ha venido ejerciendo el periodismo desde hace más de 30 años en las páginas de La Nueva España. Se diría que sus galones en el oficio fueron sus noticias, sus columnas, y una gavilla de versos que han ido depositándose como nidos en los estantes de una librería. Sus crónicas periodísticas ponen de manifiesto que detrás está un heredero de la Ilustración crítica. A esas crónicas del oficio, le fueron acompañando lentamente una serie de poemarios que daban cuenta de un escritor exigente y versátil, generoso y culto, un heterodoxo alejado de las corrientes, casi como un beduino sabio que ha visto de todo en la vida y ha encontrado la paz mineral en los versos que colman su obra poética: Cuelmo de sombras (Versus, 1988), Pasaje (Trea, 2008), Las erosiones (Trea, 2013, Premio de la Crítica de la Asociación de Escritores de Asturias), Gran desconcierto (Trea, 2018), Mar sin fin (Heracles y nosotros, 2020) y Protesta y alabanza (Impronta, 2020). Hace unos meses, presentaba el prólogo al catálogo dedicado al archivo de un fotógrafo: Julio León Costales. Fotógrafo de la Güeria de San Xuan (1956-1969), patrocinado por el Museo del Pueblo de Asturias y editado por KRK, y una antología que aglutina su brillante columna dominical El callejón de las fieras. Prosas de aquellos daños (2012-2016), publicada por la editorial Impronta, donde disfrutamos al columnista beligerante y soberano de su prosa. A cuenta de estos dos libros, mantenemos una charla sobre el oficio, el arte de la columna, su particular callejón de las fieras y la fotografía asturiana que despejan el rostro de un periodista de raza, capaz de advertir el calambre de la actualidad, sin perder en su rostro ese tono sepia, áspero y sentimental que otorga la experiencia a los vivos que no renunciaron nunca a la verdad.  

Léase AQUÍ la entrevista completa.

     DdA, XVIII/5075     

No hay comentarios:

Publicar un comentario