Félix Población
Como elector residente desde hace casi treinta años en la región leonesa (León, Zamora y Salamanca), inserta por capricho y desacertada decisión en la comunidad de Castilla y León, asisto en los precedentes de cada convocatoria electoral de carácter autonómico a la posibilidad repetidamente confirmada de que el Partido Popular siga gobernando, con el retoque en la última ocasión de un partido afín que en nada ha variado la creciente despoblación que sufre especialmente la región leonesa.
Cuando Castilla y León nació como comunidad autónoma en 1983, las tres provincias leonesas sumaban 1.200.000 habitantes, mientras que al día de hoy no se pasan de los 950.000. Se trata de la única región de nuestro país que ha retrocedido en este sentido al siglo XIX. Mientras España, durante el periodo autonómico, ha incrementado su población en un 25 por ciento, León, Zamora y Salamanca han perdido un 15 por ciento de sus habitantes.
El 72 por ciento de la población perdida por la comunidad castellano-leonesa en el último padrón del Instituto Nacional de Estadística pertenece a la región leonesa, con la provincia de León en primer lugar (¡4.733 habitantes menos en un año!), seguida de Salamanca y Zamora, con un descenso de casi 2.000. Son cifras como para poner el grito en el cielo, aunque pocos sean los gritos que se escuchan y la sordera cunda en el gobierno autonómico.
La Unión del Pueblo Leonés, el único partido que defiende una comunidad autónoma formada por las tres provincias citadas, considera que si esta región es la más envejecida de Europa y se viene despoblando a un ritmo tan galopante ante la inoperancia de los sucesivos gobiernos del Partido Popular, es en buena parte como consecuencia de su inserción en la comunidad de Castilla y León. Por eso viene reclamando que se “deje de secuestrar el derecho de la región leonesa a ser comunidad autónoma que nos reconoce la Constitución, para que Salamanca, Zamora y León podamos contar con herramientas y recursos propios para poder revertir una situación gravísima y una deriva hacia el abismo que debemos parar ya, sin más demoras".
Estamos otra vez en vísperas de poder probar un cambio de gobierno en los comicios del próximo 13 de febrero, a la vista de los datos que arroja el censo demográfico. Sin embargo, las encuestas dejan otra vez al Partido Popular muy cerca de la mayoría absoluta, como si sobre los electores de la región leonesa pesara aquel verso de don Antonio Machado dirigido en este caso a la tierra de Castilla: “Castilla miserable, ayer dominadora,/ envuelta en sus andrajos desprecia cuanto ignora”.
Los leoneses no deberían ignorar que el vaciamiento demográfico de su tierra, como el de cualquier otra, comporta su muerte. Si hasta ahora y con esos datos no ha habido voces políticas capaces de orientar el voto en contra de gobiernos reiteradamente ineficaces y un diseño autonómico erróneo, quizá sea porque la herida en el ánimo de sus gentes sea lo suficientemente grave y vieja como para no creer en la lucha contra esa despoblación que lleva a la vejez y muerte de los pueblos de los que forman parte.
DdA, XVIII/5070
No hay comentarios:
Publicar un comentario