Félix Población
Ya
tenemos circulando por el mundo una nueva variante del virus de la corona, a la
que desde ayer se le ha puesto el nombre de la décimo quinta letra del alfabeto
griego: ómicron. Los contagios de esa variante ya corren sueltos por varios
países europeos, a partir de ser detectada en Sudáfrica. Parece que no vale la
inmunidad en el primer mundo si no se acomete también en los países del tercero.
Además de un problema ético, lo que está en juego es la salud global del
planeta. El virus adquiere nuevas facultades a través de mutaciones aleatorias
allí donde campa a sus anchas ante la falta de vacunas, cuando habría vacunas
para inocular en buena parte del mundo. Estamos, según los expertos, ante la
variante más preocupante del virus, sin que de momento se sepa evaluar hasta
qué punto se ha hecho más fuerte, más contagioso o más resiste a las vacunas. La
situación de la enfermedad en nuestro continente vuelve a ser alarmante en Alemania,
Reino Unido o Países Bajos. También en Centroeuropa. Hay que subrayar, aunque
no convenga cantar nunca victoria ante el avance de la sexta ola, la buena
gestión sanitaria que se ha llevado a cabo en nuestro país. El alto índice de
vacunación con la pauta completa y el mantenimiento de medidas preventivas como
el uso de la mascarilla en lugares cerrados está dando su resultado. En esta
situación, las tres derechas se dedican a agitar la calle a costa de su
resistencia a la derogación de la Ley Mordaza, cuya reforma fue solicitada desde
Bruselas. En lugar de preocuparse por la gravedad de una posible sexta ola de
la pandemia y colaborar con el Gobierno en todo cuanto pueda hacerse para
evitarla, la oposición vuelve a combatir al ejecutivo, contando entre sus
líderes con uno en la extrema derecha
que se negó a responder si se había vacunado para no perderse los votos de quienes
no lo hicieron y ahora son una mayoría de pacientes en nuestros hospitales. ¿Se puede ir con alguien que se ha comportado así a algún lado? Pues ahí tienen a la derecha trina de la mano, contagiada de mordaza.
DdA, XVII/5022
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