Félix Población
Creo que la presidenta del Congreso de los Diputados está llevando bien las importante gestión que le toca, pero también creo que nunca en lo que llevamos de vida parlamentaria desde la Transición se le ha puesto más difícil esa tarea a quien ocupa ese cargo, debido principalmente a lo que está dando de sí la ocupación de escaños por parte de la extrema derecha. Fue precisamente en ausencia de Meritxell Batet cuando se dio hace poco una inadmisible actitud a cargo de un diputado de Vox durante una sesión en la que calificó de "bruja" a una diputada del Partido Socialista, negándose a retirar el insulto por tres veces y a desalojar el edificio a instancias de quien ocupaba la presidencia del Congreso en sustitución de Batet. El asunto se solventó suspendiendo la sesión y llamando al orden al diputado en cuestión entre bambalinas para que posteriormente retirara su agravio. No se lo que le habrá parecido a Meritxell Batet esta medida, pero personalmente me resulta lamentable que haya que suspender una sesión parlamentaria porque un diputado impresentable se niegue a cumplir con el reglamento del Congreso. Ese señor debería haber sido expulsado del hemiciclo y sancionado por su actitud, y me parece que la presidenta ha querido corregir o paliar la sensación de excesiva tolerancia que nos ha dejado ese hecho con este breve discurso de ayer, advirtiendo que comportamientos así no se pueden permitir. Las decisiones de la Presidencia en la dirección de los debates deben ser acatadas, dijo Batet, y también que no va a ser neutral en defensa de la actividad parlamentaria, equiparando esa defensa con la de la propia democracia. Desde la extrema derecha, el otro día, se ha pretendido vulnerar una y otra, interrumpiendo el desarrollo de un debate, por eso quizá Meritxel Batet ha creído oportuno su alocución disciplinaria. Desgraciadamente, la mayoría de los escaños del Congreso estaban vacíos durante la misma y el cinismo o recochineo desde los de Vox fue de traca al celebrar las palabras de Batet con aplausos.
DdA, XVII/4966
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