miércoles, 3 de marzo de 2021

¿POR QUÉ LA CORONA TRABAJA TANTO EN SU DESCRÉDITO?


Félix Población

Si se tiene cuenta lo que se especifica en el punto 4.1 de la normativa de Transparencia que podemos leer en la web de la Casa Real a partir de 2015 y no en las cuatro décadas anteriores, esos cuatro millones y pico de euros que le han suministrado al rey padre sus potentados amigos para hacer frente a sus deudas con la Hacienda Pública son  una clara vulneración de la citada normativa: “Los miembros de la Familia Real no aceptarán préstamos sin interés o con interés inferior al normal del mercado, ni regalos de dinero. En este último caso se procederá a su devolución o a ser donado a una entidad sin ánimo de lucro que persiga fines de interés general”. 

En tanto que emérito, el anterior Jefe del Estado sigue formando parte de la Casa Real, por lo que incumple esos principios, acordados cuando el esposo de su hija estaba a punto de ingresar en la cárcel por corrupción. Pareciera que esa normativa, adoptada entonces con intenciones regeneradoras, le importa a don Juan Carlos una higa al recurrir a sus potentados amigos. O como si al rey padre, puesto a no respetar la institución a la que se debe, pretendiera acumular más desprestigio sobre la misma. 

Si a eso unimos la vacunación contra la COVID de sus dos hijas en un país dictatorial como los Emiratos Árabes -por no hacer cola en el suyo y tener enchufe en Abu Dabi-, aprovechando que allí reside el ex Jefe del Estado huido de España por supuestos delitos de corrupción, tenemos completado este nuevo esperpento del deplorable espectáculo que no deja de darnos la Corona de España, como si desde la propia institución se estuviera trabajando con sumo celo para que su porvenir fuera cada vez más corto. 

¿Hasta qué punto puede resistir la monarquía española esta permanente saga de noticias denigratorias desde hace algunos años, teniendo en cuenta sobre todo que quien las protagoniza sigue siendo considerado rey emérito? ¿Se va a seguir basando el sostenimiento del régimen suscrito con la Constitución de 1978 en una institución cada vez más degradada? ¿No es como para esperar que el propio régimen se podría derrumbar de peor modo que aquel en el que los ciudadanos tuvieran por fin voz y voto para decidir el modelo de Estado?  

    DdA, XVII/4780    

1 comentario:

Gonzalo dijo...

La monarquía esta tocada de muerte, Felipe el preparado es un calzonazos, no fue capaz de poner en orden a su padre, su mujer Letizia la ficticia es la que manda con muy malos modales y las niñas con esa madre, si no acaba con la monarquía Felipito lo harán sus hijas maleducadas por su madre.

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