miércoles, 24 de febrero de 2021

EL EGOISMO DE LA ENSEÑANZA CONCERTADA

 


Vicente Bernaldo de Quirós

  Apenas recibieron un par de arañazos en sus sempiternos privilegios de clase dominante y la escuela concertada reaccionó con su histerismo tradicional y vino a decir poco más o menos que los comunistas que son los principales beneficiarios de la ley Celaa, hacían imposible la libertad de elección de los centros educativos.
   Como siempre, la concertada miente y transita en un bucle que va desde la ruptura de la libertad de los padres a la falta de dinero para poder educar a los alumnos, aunque todo el sabe que cuando hablan de educación, están hablando realmente de adoctrinamiento.
   Esta ley Celaa es pacata, porque solo trata de derogar las barbaridades que fueron leyes duran te la dominación  del PP, como la educación sectaria y clasista que impuso José Ignacio Wert, un tipo que solo trata de dividir a los estudiantes entre los que carecían de dinero y por tanto no tenían derecho a beca, y los que pertenecían a familias pudientes a los que se les daba de todo, hasta financiacion.
   Baste con que alguien con cierta curiosidad se acerque a las listas de admitidos para ser becados y a los criterios para la concesión de ese dinero para que sea patente la discriminación entre españoles y a los más senibles les entren ganas de llorar. O de vomitar, segun los casos.
   Los avalistas de la concertada pusieron el grito en el cielo porque con la nueva ley de Educación se les impide recaudar dinero entre sus alumnos para algunas supuestas actividades extraescolares, que solo benefician a los que más tienen. Y esta doble financiación para los colegios concertados, que es absolutamente ilegal, forma parte del dinero extra obte nido por los citados centros.
   Lo que más sorprende a cualquier persona de buena voluntad es que se considere discrmnatorio recibir dos veces el dinero por la misma causa y han emprendido una ofensiva contra las autoridades educativas en las que exigen que se pueda utilizar la doble financiación. Es algo así como si de un delincuente habitual protestara porque la Policía le impida seguir robando y se queje, además, de que los jueces le obligan a devolver lo robado.
   La verdad es que la escuela concertada es una anom alía en si misma. Comenzó a ponerser en valor durante el felipismo (otro gran éxito derechista del inefable Felipe González), aunque podría existir algún tipo de justificación, echándole imagonación al asunto, por el hecho de que el baby boom de aquellos años había incrementado notablemente el número de alumnos, pero ante la falta de centros escolares, algún listo apuntó a la llegada de la concertada.
   Hoy, claramente, la concertada, está fuera de bolos, porque ni hay excedente de estudiantes y la tasa de natalidad no parece que se dispare en esta democracia de trabajos precarios y sueldos inseguros. Admés, el dinero que va a los centros privados con financiación pública, se detrae de la creación, mejora y mantenimiento de la escuela pública, con lo que el Estado se hace trampas al solitario y sustrae una partida para el colegio de todos, para beneficio del colegio para unos pocos.
   Yo espero que la legislación futura apriete más las tuercas a los colegios concertados y desarrolle más partidas para la enseñanza pública. Nos va la igualdad de todos los españoles en ello. Y esperemos que el gobierno de coalición aguante toda la legislatura (y otras dos más, como mínimo) para poner en marcha medidas de equidad entre los ciudadanos y que niños y niñas puedan estudiar en igualdad y sin separación de sexos. Ni siquiera en los colegios de los más ricos que son los que se pagan.
   Siempre digo que el que quiera tener una educación distinta de los demás, que saque el talonario de cheques y pague los estudios de sus hijos/as lo suficientemente bien para que parte de esa cantidad pueda servir para crear más educación pública. Pero eso de que con el dinero de los que pagamos impuestos se beneficien solo los más ricos, tiene que acabarse ya. Y todavía no he dicho ni mu de los datos que avalan más casos de bullyng y de acoso sexual en los colegios concertados que en los públicos. Para otra vez.    

     DdA, XVII/4772     

No hay comentarios:

Publicar un comentario