En América, tierra de huracanes, naturales y/o humanos, ha sobrevenido en estos días uno muy furioso. Quienes ponen nombre a estos fenómenos, lo han bautizado como ETA, que ya son ganas de remover la mierda. Pero los huracanes de América son pasajeros. En España, no. En España, tierra de huracanes, los tres partidos (enteros) de la derecha (incluyendo a Page, Fernández Vara y familia), invocan a ETA todos los días. Que estos señores y señoras invoquen a ETA todos los días, afirmando que ETA pervive después de muerta, es la prueba evidente de que esos señores y esas señoras necesitan a ETA para sobrevivir. Y es prueba más que evidente que no se enteraron qué era ETA, y prueba contundente a su vez de que no respetan a las víctimas de ETA, a quienes les recuerdan todos los días que sus verdugos perviven. Bien es verdad que quienes sostuvieron a ETA deberían dar de una puta vez carpetazo al pasado cruento, irracional e inútil de aquella carnicería, pero que el PP y el PSOE (rama Page) sepan que sabemos, porque lo hemos vivido, que su conducta tampoco ha sido tan ejemplar en ocasiones. Tenemos la costumbre de leer las sentencias. Incluso las que no se dictan. Por respeto a las víctimas del terrorismo, tantos y tantas compañeros de sus propios partidos, los partidos enteros de la derecha y el trocito Page, de la también derecha, no deberían invocar a ETA a todas horas. Sobre todo, en horario infantil. Es decir, las 24 horas. Tanto huracán ya huele.
DdA, XVI/4668
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