sábado, 14 de noviembre de 2020

EL GÜELU NEMESIO ESTUVO EN ALHUCEMAS

 


Goti del Sol

El güelu Nemesio había cumplido sus deberes militares con la patria en aquel 1925. Pero las autoridades civiles y militares, con el dictador Primo de Rivera a la cabeza, determinaron que para vencer la rebelión rifeña gobernada por Abd el-Krim, era imprescindible atacar el corazón territorial de la revuelta desembarcando en el playón de Alhucemas. Se trataba de una maniobra militar inédita, por lo que establecieron el reenganche obligatorio en filas a aquellos que ya habían agotado el tiempo establecido. Se trataba de aprovechar la experiencia guerrera ante una contingencia tan novedosa. Y aquél 8 de Septiembre de 1925, fiesta de Covadonga en Asturias, desembarcó el güelu y, apenas pisada la arena, un disparo de fusil le alcanzó en la parte superior del pecho, cerca del hombro. Fue un impacto con entrada y salida lo que, para la sanidad de la época y el lugar, constituía una suerte dentro de la desgracia. No obstante, el desgarro lo condujo al hospital de sangre de Melilla, donde permaneció más de un mes en unas condiciones deplorables. Él y sus compañeros de dolor, hasta ratones consumieron para hacer frente al hambre.Una vez restablecido, un par de medallas por el servicio prestado y de vuelta para Gijón. Por cierto, cuando lo enviaron a esa maldita guerra colonial, otros siete gijoneses se fueron con él. Solo regresó el güelu Nemesio.

     DdA, XVI/4667    

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