jueves, 6 de agosto de 2020

CUANDO FRANCO NO QUISO A JUAN DE BORBÓN EN SU GUERRA


Siempre conviene mirar hacia atrás, a ser posible sin ira, cuando acontecimientos históricos como la huida del penúltimo Borbón de España  tiene lugar en connivencia con la Presidencia del Gobierno, cuenta con reiterados antecedentes  entre su dinastía y es motivo de indignación entre una mayoría del respetable al suponer los motivos de esa huida. Un 60 por ciento de la ciudadanía acaba de manifestarse en una encuesta en contra de la monarquía, a la espera de que los venideros acontecimientos incrementen ese porcentaje. El dato que aporta Rivas a continuación se interpreta por sí mismo, sin dar lugar a más comentarios, pues el suyo es tan conciso como suficientemente explícito: 

David M. Rivas

¿Casualidad o causalidad? Resulta que el 5 de agosto de 1936 Juan de Borbón y Battemberg, dizque Príncipe de Asturias, vestido de falangista y bajo el nombre de Juan López, pide alistarse en las tropas fascistas sublevadas contra la república. Pero este demócrata recién llegado de Roma, donde su padre, Alfonso XIII, vivía alegremente con Mussolini, choca con un antimonárquico como Mola y con un astuto Franco: “señor, usted es más útil fuera y, además, su vida es muy preciosa”. El demócrata intachable vuelve a Roma. Cuando acaba la guerra mundial el rey demócrata se refugia en Portugal, al amparo del único fascismo que sobrevive, además del de España.

   DdA, XVI/4576   

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