Lazarillo
Por temor a ser vencido por las razones de uno de sus adversarios en la lucha por el voto, Pedro Sánchez desestimó asistir al programa Salvados de La Sexta, en el que debía compartir presencia con Pablo Iglesias y responder a las cuestiones planteadas por los militantes del PSOE y Unidas Podemos. Su ausencia dejó coja una convocatoria con la consiguiente pérdida de interés. El presidente del Gobierno en funciones no se muestra favorable a exponer públicamente, en compañía de su socio "preferente", el fracaso del gobierno de coalición planteado por Iglesias. Queda por lo tanto en la audiencia la sensación de que si no ha acudido puede haber sido por falta de coraje, excesiva soberbia o simple temor a perder más votos de los que va a perder por su cobardía y recelo a enfrentarse con el mensaje que un día dio desde ese mismo programa a Jordi Évole. También se le podría acusar de una falta de respeto a sus compañeros de militancia.
A lo de Salvados se suma hoy lo de Público, a falta de seis días para los comicios, porque Pedro Sánchez tampoco será entrevistado por este periódico, como sucediera antes de las anteriores elecciones generales, razón por la cual su directora explica hoy con pelos y señales los posibles motivos que se resumen en el nombre del gurú Redondo. Así que estas preguntas quedarán sin respuesta para los lectores progresistas de ese medio: ¿Van a derogar la reforma laboral? ¿Plantean o no la mochila austriaca que
tanta polémica y temor está generando? ¿Sigue considerando a España un
país “plurinacional, nación de naciones”? ¿Por qué ‘Billy el Niño’ sigue
con su medalla pensionada o la ley mordaza sin derogar? ¿Van a abolir
la prostitución si gobiernan? ¿Legislarán por reconocer la apología del
franquismo?
DdA, XV/4328
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