martes, 12 de febrero de 2019

CONVOCATORIA DE RIVERA EN BARCELONA PARA CORREGIR LA NARANJA AMARGA DE COLÓN



Félix Población

No es necesario insistir porque ante la evidencia de las imágenes sobra todo comentario, pero creo  que es preciso hacer hincapié en algo muy fundamental que debería estar presente a partir de ahora en la valoración de los electores. La derecha -ya nadie habla de centro-derecha porque lo están perdiendo con la misma facilidad que lo crearon- se está pasando de rosca gracias al montoncito de votos que logró la extrema derecha en Andalucía hace unos meses. La derecha cree ahora que lo que toca, a lo Trump o Bolsonaro, es radicalizarse, y me temo que está perdiendo el norte o buscando a propio intento su asilvestramiento, sin la menor dignidad y con la más sucia de las estrategias a base de falacias, infamias y contradicciones, tal como el concejal de Equo Gabriel Risco explicó con suma claridad y concisión en un pleno reciente celebrado en el Ayuntamiento de Salamanca. Lo que el pasado domingo vieron muchos españoles en la Plaza de Colón respondió a la culminación del engaño como herramienta electoralista: ni las cifras fueron las que los convocantes quisieron ver, utilizando para ello fotografías de otras convocatorias, ni las soflamas leídas por tres impresentables periodistas mamporreros se atenían a la verdad. Uno de los líderes de la convocatoria, el señor Rivera, consciente de que la realidad ha sido la que fue y de que el suyo es el partido más perjudicado por el fracaso de lo que él ha llamado el espíritu de Colón, ha tratado de corregirlo el próximo domingo en Barcelona. Dado que Ciudadanos fue el partido más votado en Cataluña en las elecciones de 2017, piensa su líder que lo de Colón no habrá pesado en sus votantes catalanes y que acudirán -todos a una- a la manifestación convocada para paliar los efectos con sabor a naranja amarga de la de Madrid. Puede que también les salga mal, por su ajuntamiento con malas compañías, y porque el objetivo inmediato de una cita electoral ha hecho creer a ese partido que todo vale con tal de conseguirlo. Eso mismo está cegando a sus peligrosos aliados hasta caer en la más repulsiva desfachatez.

                  DdA, XV/4086            

No hay comentarios:

Publicar un comentario