Félix Población
Hace unos cuantos días tuvimos oportunidad de ver, ya sea en
vídeo o en fotografía, las imágenes de unos pobres elefantes heridos en medio
de una autopista manchega, después de sufrir un accidente el camión que los
transportaba, posiblemente porque no cumplía con los requisitos para que ese
transporte fuera seguro.
Los elefantes pertenecen a uno de esos circos en los
que se siguen ofreciendo espectáculos con animales, aunque cada vez son más las
ciudades en nuestro país que se oponen a ese tipo funciones. Dado que se
trataba de cinco ejemplares asiáticos, de los cuales uno perdió la vida como
consecuencia del vuelco del vehículo, estamos hablando de mamíferos placentarios en peligro de
extinción, lo que agrava más si cabe su presencia en espectáculos circenses, algo que a mi juicio debería ser erradicado.
No
sé por qué pero la imagen de los elefantes heridos me ha hecho recordar la de aquel
otro ejemplar muerto con la que se fotografió nuestro Jefe del Estado hace unos
años, cuando se fue de expedición cinegética mientras la nación las pasaba más canutas que ahora. Quizá porque sólo en un país en el
que la máxima autoridad del Estado se va de cacería de elefantes puede darse el
caso de que cinco elefantes asiáticos en peligro de extinción puedan morir en
una de nuestras autopistas al ser transportados como animales de circo.
Esto es tan descorazonador como los efectos que
está teniendo el máster fraudulento de la presidenta de la comunidad de Madrid.
Mientras esa señora se mantiene apegada a su puesto por muchas que sean las
evidencias que han venido creciendo en su contra, nadie en la universidad pública que permitió esa
trapacería es capaz de hacerse responsable de la misma, con lo que ello
comporta de desprestigio para una institución que no ha dejado de perderlo
desde que tuvo a un rector plagiario.
Están ocurriendo demasiadas cosas graves para que el régimen del 78 sobreviva entre corrupciones múltiples. Entre ellas quizá no esté de más citar, por lo que toca a la Casa Real, el rifirrafe público del pasado domingo a la salida de una ceremonia religiosa entre la esposa de Felipe VI y la madre del rey y reina emérita por una determinadas fotografías con las infantas.¿Es que tan augustas señoras han perdido los dotes de simulación que requiere el protocolo?
PIDO PERDÓN
Juan Ignacio González, profesor.
Al alumnado que con tanto esfuerzo realiza estudios universitarios de grados, masters y doctorados y que nunca han vivido el privilegio del regalo académico más abyecto y deshonesto.
A aquellos que, además, se pasan los años de carrera compaginando trabajo y estudio para poder "ser" algún día.
PIDO PERDÓN
Juan Ignacio González, profesor.
Al alumnado que con tanto esfuerzo realiza estudios universitarios de grados, masters y doctorados y que nunca han vivido el privilegio del regalo académico más abyecto y deshonesto.
A aquellos que, además, se pasan los años de carrera compaginando trabajo y estudio para poder "ser" algún día.
A aquellas familias que con tanta abnegación, esfuerzo y sacrificio
afrontan el coste de los estudios de sus hijos para que algún día puedan
tener proyecto de vida que les permita vivir con la dignidad con la que
fueron concebidos.
Pido perdón sobre todo porque sé que esta colección de malnacidos que hacen de la universidad su lugar de privilegio y mercadeo no os lo pedirán nunca.
Pido perdón sobre todo porque sé que esta colección de malnacidos que hacen de la universidad su lugar de privilegio y mercadeo no os lo pedirán nunca.
DdA, XIV/3812
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