Félix Población
El Sporting de
Gijón se fundó en 1905 y tuvo su arranque en el arenal de San Lorenzo, el mismo
escenario que sirvió de campo de sueños para sucesivas generaciones de guajes,
por negados que fuéramos para la práctica del fútbol.
No recuerdo si fue con el
entrenador Carriega, fallecido hace unos días y con el que Quini se estrenó como titular en el Sporting, pero lo cierto es que el club hizo una llamada por los
años sesenta para seleccionar a lo mejor de la naciente cantera en bruto local
y tuve la osadía de presentarme en el viejo campo de Los Fresnos.
La
experiencia fallida me separó para siempre de aquel sueño en el mismo lugar en
que, casi coincidentemente, empezó a cobrar realidad la carrera del más afamado
y goleador de los futbolistas españoles del último medio siglo.
Ayer se nos fue
Enrique Castro “Quini”. Le falló el corazón en una céntrica calle gijonesa y
nada se pudo hacer por evitar su ausencia para siempre de El Molinón, donde
tanto fervor levantó en las gradas con sus remates inverosímiles que le
valieron el sobrenombre de El Brujo.
Comprendo el sentimiento que hoy empaña de
pesar a los sportinguistas y del que en cierta medida participo como deudo de
mi memoria sentimental, pero creo que los medios de información de este país,
en lugar de conceder grandes titulares a los deportistas fallecidos -por buenos
y populares que fueran también como personas, como es el caso- deberían prestar
esa relevancia a otros horizontes mucho más constructivos para nuestro porvenir.
Hace unos meses falleció Gabriela Morreale de Castro, bioquímica,
precursora de la detección precoz de hipotiroidismo congénito en recién nacidos
mediante la prueba del talón.Si se le hubiera preguntado a Quini quién merece los titulares que hoy se le dan a su persona en la prensa asturiana, todos sabemos que se descartaría.
No quiero dejar sin imagen al ausente, y me parece que ésta, aportada por mi amigo Joaquín, es una más de las muchas que se pueden aportar como mejor memoria y homenaje al fallecido futbolista.
No quiero dejar sin imagen al ausente, y me parece que ésta, aportada por mi amigo Joaquín, es una más de las muchas que se pueden aportar como mejor memoria y homenaje al fallecido futbolista.
DdA, XIV/3781
No hay comentarios:
Publicar un comentario