Lazarillo
Desconozco las razones litúrgicas por las cuales cuando no es año de jubileo en Compostela, esto es, cuando el día de Santiago no cae en domingo, se emplea en la catedral el botafumeiro en fecha tan señalada como la Epifanía del Señor, que tiene lugar el 6 de enero. Dos de los monaguillos que están al servicio del culto en ese histórico y monumental recinto sí debían tener constancia de esa circunstancia, pues rellenaron con medio kilo de marihuena el interior de tan socorrida y ambientadora herramienta pendular. La consecuencia no pudo ser otra que la extrañeza de los fieles concurrentes ante la nueva atmósfera que se respiraba en el templo en cuanto el botafumeiro dio en airear tan inesperadas esencias. Todo acabó con la detención de los dos monagos por agentes policiales, advertidos acaso por un perspicaz husmeador que quizá se hallara entre el respetable. Los dos chanceros fueron puestos en libertad posteriormente, aunque no podrán volver a ejercer el servicio por el que se sintieron tentados a celebrar una epifanía tan mariana. Nada nos dice la noticia sobre cómo se pudieron agenciar ambos monagos medio kilo de maría para dilapidarlo tan gratuitamente, ni tampoco acerca del estado anímico de la feligresía al término de la ceremonia religiosa, o si a lo largo de la misma se dejó sentir algún atisbo de euforia anómalo entre los asistentes.
DdA, XIV/3742
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